La CNMV sitúa la ratio de gastos en el 0,66% frente al 1,04% de la media europeaLos fondos españoles de renta fija soportan unos costes inferiores que la media de sus homólogos europeos pero a cambio de proporcionar una rentabilidad bruta también menor. Es la conclusión que se puede extraer de los datos adelantados por la CNMV en su último boletín trimestral y que ponen en evidencia que, a pesar de soportar un gasto más reducido, no ofrecen un rendimiento más elevado. Un problema que se agrava con las escasas perspectivas de revalorización que tienen los fondos de renta fija a medio plazo (ver página 17). Los datos adelantados por la CNMV, que está elaborando su propio estudio sobre costes y rentabilidad de los fondos españoles, trata de corregir el informe que presentó la Autoridad Europea del Mercado de Valores (ESMA, por sus siglas en inglés), donde se analizaban los productos de inversión en la UE. En dicho informe, los fondos de renta fija españoles aparecían retratados con una ratio de gastos totales del 0,81 por ciento, sin tener en cuenta las retrocesiones que realizan las gestoras a los distribuidores para que comercialicen sus productos. La media de retrocesión de comisiones de gestión se situaba en el 50 por ciento en junio de 2019, según los cálculos del supervisor del mercado español. Con los datos elaborados por la CNMV, la ratio de gastos soportada por los fondos españoles de renta fija se situaría en el 0,66 por ciento, que sería algo menor teniendo en cuenta el tema de las retrocesiones, y bastante por debajo del 1,04 de la media europea. Pero tras esta aparente mejor posición de los fondos españoles de deuda se esconden unos peores resultados de rentabilidad. Según el estudio de Esma, que utilizó para su análisis la base de datos de Thomson Reuters Lipper, los fondos españoles ofrecen de media a diez años un rendimiento del 2 por ciento y soportan una ratio de gastos totales (TER) del 0,85 por ciento, mientras, un porcentaje de rentabilidad bastante inferior al 3,83 por ciento que dan los fondos europeos de esta categoría, aunque su coste sea más elevado, del 1,14 por ciento.Con un horizonte temporal de siete años, los resultados son igualmente tristes para España, ya que a pesar de que los fondos domésticos ofrecen una rentabilidad del 2,04 por ciento con una TER del 0,88 por ciento, sus homólogos europeos proporcionan una media del 3,68 por ciento aunque cobran un 1,17 por ciento. En los fondos españoles de renta variable la CNMV ha calculado una ratio de gastos totales media del 1,81 por ciento, frente al 2,15 por ciento que mostraba la ESMA para los productos españoles y el 1,76 por ciento de media de los fondos europeos de bolsa.