Netflix pasa de ingresar 34,4 millones a superar los 656 desde que declara todo su negocio en el país

Netflix Servicios de Transmisión España, filial del gigante del streaming en nuestro país, cerró 2022 con una facturación de 656,2 millones de euros, un 13,3% más que en 2021, según consta en las cuentas depositadas en la Registro Mercantil a las que ha tenido acceso elEconomista.es.

Lo llamativo está al remontarse un año más en el tiempo, puesto que se trata de 19 veces más que la cifra de negocios que registraba en 2020. La clave reside en que fue a partir del 1 de enero de 2021 cuando empezó a tributar en España por todo lo que genera en el país en lugar de hacerlo a través de la matriz de la compañía en Holanda.

Esto también se ha visto reflejado en el resultado neto de la compañía. El grupo cerró 2022 con unas ganancias de 9,5 millones de euros, un 9,15% más que en 2021 y un 520% más que en 2020, o lo que es lo mismo, en dos años ha multiplicado su beneficio neto por seis.

La contribución fiscal de la filial en España del gigante del streaming se ha disparado un 345%. En 2020 pagó en impuestos a penas 712.770 euros, mientras que esta cifra se incrementó hasta los 2,7 millones en 2021, el primer ejercicio declarando todo su negocio en España y en 2022 ha escalado hasta los 3,1 millones.

Pese a que la compañía anunció a mediados del año pasado el despido de 300 personas, estos recortes no parecen haber afectado a la plantilla en España. A cierre de 2022, la compañía contaba con una media de 52 empleados, un 18,18% más que en 2021, cuando eran 44 trabajadores.

Su productora dobla el beneficio

Las cuentas de la filial en España de Netflix se han conocido dos semanas después de que la plataforma diera a conocer los datos económicos de su productora, Los gatos entretenimiento. En este caso, duplicó su beneficio y casi triplicó su contribución fiscal. La productora logró un resultado neto de dos millones de euros en 2022.

Además, la productora de Netflix pagó un total de 713.423 euros en 2022, frente a los 259.044 euros del año anterior, lo que supone un incremento del 175%. Esta tendencia se lleva apreciando desde el 2020, cuando pagó alrededor de 400.000 euros en impuestos.