Madrid

Madrid recorta en 170 pisos la última gran bolsa de VPO de Valdebebas

  • El Ayuntamiento cambia la edificabilidad residencial por un uso terciario
El madrileño barrio de Valdebebas. <i>Foto: Archivo</i>.

Alba Brualla

El Ayuntamiento de Madrid ha comunicado su propuesta para la última bolsa de vivienda protegida del ámbito de Valdebebas, conocida como la pastilla comercial, y que está pendiente de que se apruebe una modificación del Plan General para poder iniciar la construcción de unas 1.000 viviendas, así como un colegio y un centro comercial.

Según han confirmado a elEconomista fuentes cercanas al proceso, el Consistorio que lidera Manuela Carmena ha presentado un recorte a la edificabilidad residencial que pasa de los 109.000 metros cuadrados actuales a 92.000 metros cuadrados. "Esto se traduce en unas 172 viviendas menos de las 1.000 que estaban previstas y que eran, en su mayoría, protegidas", explican las mismas fuentes.

Esto supone un impacto importante en las cuentas de la Junta de Compensación de Valdebebas y del resto de propietarios particulares como son Premier, que cuenta con una parcela de vivienda libre y Pryconsa, propietaria de 14 parcelas de vivienda protegida.

"La edificabilidad residencial se recorta en beneficio de los usos comerciales y de oficinas, lo que supone un impacto a corto plazo en la rentabilidad de los tres afectados, ya que una vivienda se vende ahora, pero los otros inmuebles nunca sabes cuando los vas a comercializar", indican.

Los otros dos afectados, la cooperativa Valdecam, compuesta por 65 familias propietarias de una parcela de vivienda protegida, y Joyfe, quien va a levantar un colegio privado en la zona, muy demandado por los vecinos de Valdebebas, no han visto reducida su edificabilidad. Aún así, ven peligrar su proyecto, que solo saldrá adelante si todas las partes dan el visto bueno a la propuesta del Ayuntamiento. En este sentido, los afectados aseguran que Carmena únicamente está dispuesta a llevar a cabo la modificación puntual del Plan General con el acuerdo de todos los implicados, lo que sitúa la pelota en el tejado de la Junta de Compensación y de las dos promotoras.

Los problemas para la cooperativa y para los propietarios del resto de suelos arrancó el año pasado, un 4 de marzo, dos días después de que las 65 familias cerraran la compra del terreno para levantar sus casas en modelo de cooperativa. Ese día el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) anuló el Plan Especial que el Ayuntamiento de Madrid había aprobado en octubre de 2014 para cambiar el uso de estos terrenos, que en un principio estaban destinados a acoger un gran centro comercial y edificios de oficinas.

Estos planes cambiaron con la crisis y se diseñaron 16 parcelas residenciales y una dotacional, donde Joyfe proyecta un colegio. Pero la sentencia del pasado 4 de marzo bloqueó el proceso y desde entonces todos los afectados negocian con el Ayuntamiento para reformular un nuevo proyecto que dé salida a los cinco afectados.