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El 33% de los jóvenes descarga obras piratas de forma intencionada

  • Entre los europeos, consume contenido ilícito el 25%. Series y cine, lo más descargado
Imagen: archivo

Pedro del Rosal

Uno de cada tres jóvenes españoles de entre 15 y 24 años -el 33 por ciento- admite haber consumido contenidos ilícitos en Internet de forma intencionada en el último año. El 17 por ciento, por su parte, reconoce haber accedido a obras protegidas, pero "por accidente".

El resto de los encuestados o no usó este tipo de fuentes -el 31 por ciento- o responde que no sabe si lo hizo -el 19 por ciento-. Son datos de la encuesta Propiedad Intelectual y Juventud, elaborada por la Oficina de la Propiedad Intelectual de la Unión Europea (Euipo, la antigua Oami).

Entre los jóvenes europeos, el porcentaje de los que admite haber accedido conscientemente en el último año a contenidos que vulneran los derechos de autor son el 25 por ciento. Los que lo hicieron accidentalmente fueron el 13 por ciento.

El precio de la obra original es el principal factor que impulsa a los españoles y a los europeos -para siete de cada diez- a descargarse o acceder ilegalmente a las obras. Tras ello, los encuestados alegan el uso personal del contenido, la posibilidad de acceder a productos únicos o la disponibilidad con mayor rapidez de la obra.

El argumento económico también el que esgrimen los encuestados como razón para dejar de consumir contenido ilícito. El 66 por ciento de los jóvenes españoles -y el 58 por ciento de los europeos- lo haría si hubiera "productos originales asequibles". El riesgo de sanción o una mala experiencia con estos métodos son las otros dos principales motivos.

En relación con el contenido descargado, el 87 por ciento de los jóvenes españoles que accedió a obras ilícitas admitió haber descargado películas y series; el 62 por ciento, música; y el 31 por ciento, juegos.

Compra de falsificaciones

La encuesta también incluye datos sobre la compra online de bienes falsificados. El 19 por ciento de los jóvenes españoles reconoce haber comprado estos productos. Una cifra que entre los europeos se reduce al 12 por ciento. El menor precio es la principal razón de este tipo de consumo.

Los productos falsos más adquiridos son ropa y accesorios, dispositivos electrónicos, calzado y joyas y relojes.