Muere Otto Warmbier, el estudiante de 22 años de EEUU liberado por Corea del Norte en estado de coma

El estudiante estadounidense Otto Warmbier, que estuvo retenido 17 meses en Corea del Norte hasta que regresó a su país en estado de coma hace menos de una semana, ha fallecido este lunes en un hospital de Cincinnati, ha informado su familia. Tras conocerse la muerte de Warmbier, el presidente estadounidense ha criticado al "régimen brutal" norcoreano.

"Desafortunadamente, el terrible y tormentoso tratamiento que nuestro hijo recibió de manos de los norcoreanos impidió que cualquier otro resultado fuera posible más allá de lo que tristemente experimentamos hoy", ha indicado la familia en un comunicado tras la muerte del joven, de 22 años. El fallecimiento se produjo la tarde del lunes en el Centro Médico de la Universidad de Cincinnati.

En respuesta a la muerte, el presidente estadounidense ha comentado durante un acto en la Casa Blanca que "han pasado muchas cosas malas, pero al menos se consiguió que volviera a casa para que estuviera con sus padres". "Corea del Norte es un régimen brutal y podremos ocuparnos de él", ha apostillado Trump.

El comunicado oficial recoge las condolencias de Trump. "El destino de Otto refuerza la determinación de mi Administración de evitar que estas tragedias caigan sobre personas inocentes ante regímenes que no respetan el estado de derecho ni la decencia humana más básica", señala.

La familia de Warmbier sostiene que Warmbier quedó en coma en marzo de 2016, poco después de ser sentenciado a 15 años de trabajos forzados en Corea del Norte. El estudiante fue arrestado por tratar de robar un cartel de propaganda, según la prensa norcoreana.

McCain tilda el suceso de "asesinato"

El senador estadounidense y excandidato a la Casa Blanca, John McCain, ha acusado por su parte a Corea del Norte del asesinato de Otto Warmbier. "La situación ha escalado hasta el punto de que practican actos de brutalidad contra estadounidenses. EEUU no puede y no debe tolerar el asesinato de sus ciudadanos a manos de una potencia hostil".

"En el último año de su vida, (Warmbier) vivió la misma pesadilla en la que los norcoreanos han vivido atrapados desde hace setenta años: trabajos forzados, deportaciones en masa, crueldad sistemática, tortura y asesinato", ha añadido el senador.

Corea del Norte liberó a Warmbier la semana pasada, una decisión que obedecía a "razones humanitarias", pero según los análisis había sufrido ya un daño neurológico grave. El país asegura que el joven entró en estado de coma por botulismo pero los médicos estadounidenses han expresado serias dudas sobre ese diagnóstico.