Internacional
Hacerse visible al turismo pintándose de arcoiris: la estrategia de inversión de un pueblo perdido de Indonesia
- Kampung Pelangi buscó ser destino turístico en una isla con muchas visitas
elEconomista.es
No muy lejos de Yakarta existe un pueblo que ha conseguido algo con lo que muchos sueñan de pequeños: tocar el arcoiris. Lo ha hecho pintando todas sus casas de los colores que conforman esta banda inalcanzable que se crea cuando el sol y la lluvia comparten momento. Y su nombre, traducido al español, es precisamente ése: Pueblo Arcoiris. La idea surgió como táctica para dejar de ser invisible ante los millones de turistas que eligen Indonesia como destino.
Kampung Pelangi, nombre por el que se encuentra en los mapas de la isla de Java, llama la atención por las 223 casas que comparten colores y llenan de dibujos los paseos. En sus fachadas pueden encontrarse desde globos hasta amigables monstruos o dibujos geométricos de mil formas. Y no solo en las paredes. Los bancos e incluso los maceteros no se escapan al color.
Solo el suelo de las calles consigue mantenerse gris, color que predominaba en este pueblo situado entre el Índico y el Mar de Java. Según recoge Lonely Plantet, el Gobierno invirtió 23.000 dólares en dar vida a sus calles como reclamo al turismo, que ha repercutido de manera positiva en la economía local y en los pequeños negocios de los habitantes.
Desde entonces, Kampung Pelangi se ha hecho el hueco que hasta ahora no tenía en los álbumes de quienes visitan Indonesia, según puede comprobarse buscando su nombre en diferentes redes sociales, donde ya tiene entidad propia.
A tenor del éxito del baño de color, el siguiente movimiento pasa por una inversión aún mayor para pintar el resto de casas, un total de 390, y por limpiar el río que cruza el pueblo, en un proyecto mucho más ambicioso con el que busca ser un punto de referencia en las guías de viajes.