Internacional

'Tories' y laboristas proponen disparar la inversión pública en Reino Unido

  • El ministro de Finanzas promete aumentar el gasto hasta el 3% del PIB
  • Los laboristas planean duplicar los fondos para construir infraestructuras
El ministro de Finanzas, Sajid Javid, y el portavoz económico laborista, John McDonnell. Foto: Reuters

Víctor Ventura

La era de la austeridad en Reino Unido, inaugurada por David Cameron en 2010, ha llegado a su fin. En el segundo día de campaña electoral, los responsables económicos de los dos principales partidos presentaron sus planes de gasto para los próximos cinco años. Y los anuncios se convirtieron en una competición por ver quién prometía gastar más dinero en infraestructuras en inversiones tras casi una década de recortes.

El ministro de Finanzas, Sajid Javid, se comprometió a aumentar el gasto público en 20.000 millones de libras anuales, hasta un 3% del PIB frente al 1,8% actual, incrementando la inversión en infraestructuras, carreteras, hospitales y banda ancha. Este nivel sería el más alto de los últimos 40 años, según el Instituto de Estudios Fiscales (IFS). El gasto corriente, por su parte, quedaría equilibrado, de forma que fuera sostenible incluso en caso de una recesión. La deuda, mientras tanto, se mantendría estable o se reduciría ligeramente, lo que no sería un gran problema en la era de tipos negativos.

Pero su homólogo laborista, John McDonnell, fue un poco más lejos y rechazó las promesas de David por ser demasiado rácanas. Si ganan, anunció, subirán la inversión pública en 55.000 millones de libras anuales, a las que sumará un fondo de 150.000 millones para el próximo lustro dedicado a "lograr la transformación social", especialmente en áreas como el cambio climático.

Bajo su programa, el objetivo sería aumentar el valor del sector público, mientras que el gasto corriente se mantendría equilibrado "en tiempos normales". Y emitiría toda la deuda pública que hiciera falta, hasta que el gasto en intereses alcanzara un límite de un 10% de los ingresos públicos.

Javid concedió que había llegado la hora de abrir la cartera, pero aseguró que las diferencias entre el plan 'tory' y el laborista eran "como la noche y el día". "Nosotros tenemos buenas razones para invertir, pero a los laboristas no se les puede dejar a cargo de la economía", dijo. La pregunta es si los votantes se fijarán en los detalles que separan los planes o solo verán que los laboristas prometen más dinero.