Infraestructuras y Servicios
Las infraestructuras sostenibles suponen un reto colaborativo
- Hay que buscar materiales de construcción alternativos que sean eficaces, de larga durabilidad y poco contaminantes
elEconomista.es
Madrid,
La huella medioambiental en el sector de la construcción es un gran desafío y cada vez más participantes de este ámbito toman conciencia. Descarbonizarlo es uno de los retos más complejos y a ello se le suma que los materiales tradicionales con los que se llevan a cabo las infraestructuras son contaminantes. Por lo tanto, hay que buscar alternativas. Estas deben ser eficaces, de larga durabilidad y que contaminen lo menos posible. Este fue uno de los temas que se tratraron durante el Observatorio Construcción verde, organizado por elEconomista.es en colaboración con Acciona.
En la mesa de debate participaron Edith Guedella, responsable de Sostenibilidad del Negocio de Construcción de Acciona; José Luis García Calvo, vicedirector del Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja-CSIC, y Julia Ayuso, directora de la Escuela de Sostenibilidad de la Universidad Europea. "La construcción verde es aquella que busca una reducción en la huella ambiental de todo el proceso constructivo, desde la extracción de materiales hasta el fin de la vida", explicó Edith Guedella, responsable de Sostenibilidad del Negocio de Construcción de Acciona.
Parte importante de ese proceso son materiales como el cemento o el aluminio, esenciales para la construcción, pero potencialmente nocivos para el medioambiente. Por eso, este sector estudia diferentes posibilidades como, por ejemplo, producir materias primas mediante residuos. El cemento tradicional puede sustituirse por el verde. José Luis García Calvo, vicedirector del Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja-CSIC afirmó que "este puede reemplazarse gracias a residuos forestales procedentes de la construcción de biomasa". Una idea que reforzó Guedella: "Gracias al empleo de este, hemos conseguido bajar la huella un 40%", añadiendo que para suelos en Acciona trabajan con cenizas que tienen una composición muy buena para que se ligue.
Estos avances se consiguieron gracias a la colaboración de todos los participantes del proceso constructivo. Así lo comunicó Julia Ayuso, directora de la Escuela de Sostenibilidad de la Universidad Europea: "Es fundamental que los profesionales tengan una visión multidisciplinar, que no solo se encarguen de la construcción verde los ingenieros, sino todos los partícipes". En cuanto a las innovaciones, la directora de la Escuela de Sostenibilidad de la Universidad Europea explicó que están desarrollando un proyecto que consiste en añadir bacterias a materiales de construcción "que hace que sean autorreparables".
En la pavimentación, otra de las novedades es utilizar hormigones expansivos. En este sentido, el vicedirector del Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo TorrojaCSIC aclaró que "esta nueva materia prima fisura mucho menos, por tanto, estas son más duraderas". Y agregó que el proceso consiste en añadir un agente fotocatalítico al hormigón tradicional, que lo convierte en descontaminante.
Por su parte, la responsable de Sostenibilidad del Negocio de Construcción de Acciona indicó que para reducir la huella era importante mejorar en todas las fases, incluso en la ejecución. Durante su intervención manifestó la importancia de estudiar cada estadio del proceso de producción.
Edith Guedella, Responsable de Sostenibilidad del Negocio de Construcción Acciona: "Gracias a la utilización de cemento 'verde' hemos conseguido bajar la huella un 40%"
Uno de los objetivos del sector de la construcción es reducir el impacto medioambiental. Sin embargo, los materiales que se utilizan tradicionalmente son contaminantes. Para Edith Guedella, responsable de Sostenibilidad del Negocio de Construcción de Acciona, "es fundamental encontrar alternativas de aquí a 2050 porque la temperatura sube. No nos queda más remedio que descender ese impacto".
Desde Acciona han llevado a cabo proyectos para utilizar otros materiales, cuya composición sea más respetuosa con el medioambiente. Un ejemplo de ello son los cajones portuarios que diseñaron en una terminal de Cádiz con cemento verde, "gracias a utilizarlo hemos conseguido bajar la huella un 40%", explicó Guedella. Además, apuntó que en el entorno construido, el impacto ambiental principalmente proviene del hormigón, "del cual el 80% de su huella es el cemento", especificó la responsable de Sostenibilidad del Negocio de Construcción Acciona.
Otro material que les preocupa es el aluminio, muy utilizado en edificación, por ejemplo para las ventanas. No obstante, la empresa ha conseguido suministradores que les proporcionan este material 100% renovable y que esté fabricado con métodos que hacen que su huella sea bastante reducida.
En el caso de los suelos, "trabajamos con cenizas que tienen una composición muy buena para que se ligue", indicó. Aun así, cuenta con propiedades diferentes al cemento y se requiere investigación porque "el fraguado es más lento", señaló. En cuanto a la inversión, "todavía estamos poco avanzados", reconoció Guedella, quién añadió que "los nuevos materiales tienen un sobrecoste frente a los tradicionales. Sin embargo, si establecemos el ciclo de vida completo de los materiales, el coste no se ve incrementado, todo lo contrario, porque plantea una mejora dentro de la huella de la infraestructura y el compromiso de alcanzar las emisiones cero".
En este sentido, reclama que toda la cadena debe demandar la puesta en valor de los materiales: "Todos invertimos en la descarbonización porque es un compromiso, pero buscamos que se impulse desde todos los actores".
Acciona acude a las licitaciones con esfuerzos de inversión para asegurar que sus materiales sean verdes. Por un lado, "asumimos un riesgo y, por otro, tenemos un compromiso que hemos ligado a nuestra financiación", expuso. Guedella explicó que cuentan con sistema de cribado en el que se establece un semáforo que analiza exhaustivamente los proyectos teniendo en cuenta los riesgos de sostenibilidad, entre otros. Si no superan este análisis, no se ejecutan los proyectos, "es la forma de establecer nuestra estrategia en materia de sostenibilidad".
De cara a obtener inversión verde, desde Acciona se ha creado un framework de financiación sostenible "donde hemos establecido indicadores específicos por proyectos", apuntó. En dicho framework establecen su definición de sostenible y a partir de ahí, lo incorporan dentro de las estrategias que exijan los financiadores.
Julia Ayuso, directora de la Escuela de Sostenibilidad de la Universidad Europea: "La universidad es un motor de cambio y tiene un gran papel si apostamos por lo multidisciplinar"
Los arquitectos, ingenieros, investigadores, químicos y estudiantes que se dedican a la construcción verde tienen algo en común, necesitan la colaboración del otro si quieren conseguir su objetivo. "La universidad es un motor de cambio y tiene un gran papel si apostamos por lo multidisciplinar", comenzó su ponencia Julia Ayuso, directora de la Escuela de Sostenibilidad de la Universidad Europea. Con ello se refiere a que todos los actores deben entender cada fase del proceso de construcción, aunque no sea la suya. Y añadió que "no se trata solo un reto técnico".
En cuanto a las innovaciones que se están llevando a cabo desde la Universidad Europea, Ayuso explicó que están trabajando "en un proyecto de descarbonización de edificios de vivienda social muy humildes". Bien es cierto que reducir el impacto ambiental es necesario, pero "también debemos hacerlo a nivel social", puntualizó la directiva. Además reconoció que "es gratificante ver cómo una persona con recursos limitados mejora su bienestar y el orgullo que tienen esas personas por cuidar su edificio".
Otra novedad en la que están trabajando, con el objetivo crear materiales sostenibles, es darles a estos componentes la capacidad de autorrepararse a partir de añadirles bacterias. En la Universidad tienen varias líneas de investigación claras. La primera es usar residuos de construcción de hormigón "bajos en carbono", nombrado así porque es un residuo reciclado. La segunda es mejorar las prestaciones de esos materiales y la tercera línea tiene que ver con el estudio de la viabilidad de materiales alternativos, "sobre todo los basados en biocompuestos provenientes de agricultura", declaró Ayuso.
En cuanto al alumnado, la directora de la Escuela de Sostenibilidad de la Universidad Europea admitió que el interés actual en comparación con años anteriores es "indiscutible". Y agregó que "la conciencia de las nuevas generaciones es alta. Los estudiantes que tenemos vienen de manera vocacional y son conocedores de que las pequeñas acciones producen cambios. Tienen unas ganas muy grandes de pasar a la acción"
José Luis García Calvo, vicedirector del Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja-CSIC: "Mediante un agente fotocatalítico hemos creado un hormigón expansivo y descontaminante"
Una de las metas de la sostenibilidad es consumir menos, además de producir mejor. En el sector de la construcción se necesitan materiales que "sean duraderos, que disminuyan los costes de mantenimiento y que minimicen el consumo de recursos. En concreto, en edificación hay que reducir el impacto energético", indicó José Luis García Calvo, vicedirector del Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja-CSIC. La importancia de la duración de los materiales es un aspecto en el que insistió García Calvo, porque no es sostenible una infraestructura hecha con materiales verdes si esta dura "solo cinco años".
En cuanto a los nuevos materiales, García Calvo reconoció que "no todo vale", añadiendo que en primer lugar, "para empezar a usarlos es importante que haya suficiente cantidad para que salga al mercado. Segundo, que tenga una composición que no varíe en mucho tiempo. Y tercero, se han de mejorar las prestaciones, si no es posible, al menos mantenerlas".
Una de esas materias primas que han creado es el hormigón expansivo, "que fisura mucho menos y, por tanto, es más duradero. Además, los tiempos de ejecución son más rápidos", explicó el vicedirector del Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo TorrojaCSIC. Consiste en añadir un agente fotocatalítico al hormigón tradicional, que lo convierte en descontaminante. El vicedirector ejemplificó que "en Madrid, hay un pavimento que se hizo fotocatalítico cerca del Ayuntamiento y de Embajadores".
Otra innovación que se está desarrollando son unos morteros que cambian de color dependiendo de la temperatura. Cuando hace calor, éste se vuelve más claro para irradiar la luz. En cambio, cuando hace frío, el mortero oscurece. García Calvo puso importancia en la cercanía de los recursos. "Se debe abogar por productos locales, no solo a nivel nacional, sino aquellos que estén lo más cerca posible", e ilustró con el caso de Latinoamérica, que disponen de pequeñas "plantitas" hormigoneras para no tener que desplazarse.
En relación con la financiación para llevar a cabo una construcción sostenible, el vicedirector reconoció que hace unos años estaba más diluido: "En el actual marco estratégico de la Unión Europea la construcción sostenible está entre sus pilares como una de sus líneas estratégicas".
Además de la financiación, también existen procedimientos para medir si un proyecto es respetuoso con el medioambiente, aunque todavía no es suficiente. García Calvo afirmó que "en varios países empiezan a meter pliegos de durabilidad, que no de sostenibilidad, pero estamos en el camino de que se empiecen a tener en cuenta". Si hay algo que se ha de resaltar es la colaboración entre todos los agentes implicados en el sector de la infraestructura. El vicedirector aseguró que en cuanto la sociedad empiece a demandar estos materiales, "habrá un cambio" y concluyó que "desde la construcción podemos hacer mucho".