Raphael reaparece en plena lucha contra el cáncer, sin mascarilla y camino del logopeda: las claves de su recuperación

Tranquilo, sonriente y del brazo de su inseparable compañera, Natalia Figueroa. Así reaparece este martes el cantante Raphael, apartado de los focos desde que el pasado mes de diciembre le fuera diagnosticado un linfoma cerebral. El artista continúa con su tratamiento médico para mantener a raya la enfermedad y esta última salida corresponde, precisamente, a una visita al logopeda, quien le ayuda a recuperar una perfecta dicción. "Está estupendo, con muy buena cara y muy recuperado", aseguran.

Las últimas imágenes del intérprete de Mi gran noche llegan este miércoles con la revista Diez Minutos. Raphael luce muy buen aspecto, con gafas de sol, abrigo azul y una bufanda que lo protege del frío. Su rostro tranquilo, sereno y al descubierto, sin la mascarilla que ha utilizado en sus últimas salidas al médico, signo de que su sistema inmunológico vuelve a estar fuerte. Sin duda, una gran noticia para todos sus amigos, compañeros y seguidores, que están deseando verlo de nuevo sobre el escenario: "Va a volver al Starlite este verano, se están vendiendo muy bien sus entradas", afirman en Tardear, una posibilidad que ya adelantamos en Informalia el pasado 5 de febrero.

Hablamos entonces con el entorno más cercano de Raphael, que nos confirmaba su buena evolución médica: "El tratamiento funciona de una forma eficaz y progresiva. Uno de los nódulos ha desaparecido por completo y al otro le queda solo una parte", nos contaban. Su ánimo sigue intacto y recibe las visitas de familiares y amigos en su hogar. Además, realiza pequeñas salidas con su mujer al cine que hay muy cerca de su casa para disfrutar de los nuevos estrenos del Séptimo Arte.

Recordemos que fue el 17 de diciembre, mientras David Broncano grababa para La Revuelta una entrevista con el cantante, cuando se dieron cuenta que algo no iba bien a la hora de expresarse. El propio Raphael pidió ser trasladado al hospital, donde todo indicaba que podía ser un ictus. En un examen posterior, el diagnóstico de los médicos del Hospital 12 de octubre fue el de "linfoma cerebral primario, con dos nódulos cerebrales en el hemisferio izquierdo que justifican los síntomas neurológicos que presentó hace unos días". El tratamiento, a base una quimioterapia muy localizada, empezó durante su estancia de 10 días en el hospital y ha seguido de forma ambulatoria.

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