Hudson Meek, conocido por su papel en Baby Driver, falleció trágicamente el pasado día 21 de diciembre a la temprana edad de 16 años tras caer de un vehículo en marcha en Vestavia Hills, Alabama (Estados Unidos). El joven fue trasladado de inmediato al Hospital UAB en Birmingham, pero poco se pudo hacer por salvar su vida, ya que sufrió un fuerte traumatismo.
La noticia de su fallecimiento ha sido confirmada este jueves en la cuenta de Instagram del intérprete. "Nuestros corazones están rotos, Hudson Meek se ha ido al encuentro de Jesús esta noche. Sus 16 años en la tierra han sido demasiado cortos, pero consiguió muchas cosas e impactó significativamente las vidas de todos aquellos que lo conocieron", han manifestado. Más tarde, han actualizado el post para informar que la ceremonia en su honor se celebrará el próximo sábado 28 de diciembre en la Iglesia Bautista Dawson Memorial de Homewood (Alabama) y será retransmitida por streaming.
La madre de Hudson, Lani Wells Meek, también ha homenajeado a su hijo públicamente. "Sus 16 años en esta tierra fueron demasiado cortos, pero logró mucho e influyó significativamente en todas las personas que conoció", ha expresado en sus redes sociales.
En el obituario, su familia también le ha dedicado unas bonitas palabras. "Hudson era reflexivo y pensativo, pero tenaz cuando se proponía algo. Obtuvo la certificación de buceador en aguas abiertas a los 13 años… Visitó los 50 estados de EE. UU. y su meta era conocer los 7 continentes. Le encantaba esquiar y podía descender por las pistas más difíciles" ,han señalado.
El terrible suceso se produjo el pasado 20 de diciembre sobre las 23:00 horas, tal y como ha informado el diario Al.com. Asimismo, según fuentes de la investigación, se ha confirmado que Hudson sufrió lesiones graves al caer al asfalto desde un vehículo en movimiento.