El productor musical Sean Combs, más conocido como Puff Daddy o Puffy, fue arrestado este pasado verano tras ser acusado de presunto tráfico sexual, crimen organizado y trata de personas. Un escándalo que ha reabierto un nuevo Me Too en Hollywood y sobre el que la madre del magnate del hip hop, Janice Smalls Combs, se ha pronunciado.
La madre del empresario ha emitido un comunicado afirmando que las acusaciones carecen de sentido. "Vengo hoy ante ustedes como una madre devastada y profundamente entristecida por las acusaciones contra mi hijo", ha avanzado Smalls Combs, de 84 años.
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La progenitora de Puff Diddy lamenta que se esté juzgando a su hijo sin haber tenido ni siquiera la oportunidad de defenderse adecuadamente. "Es desgarrador ver a mi hijo procesado no por la verdad, sino por una narrativa hecha de mentiras", ha añadido.
Smalls Combs ha hecho referencia a la agresión que su hijo cometió en el año 2016 contra su exnovia Cassie Ventura. Los hechos ocurrieron en el Hotel InterContinental en Century City, en Los Ángeles, y las imágenes captadas por las cámaras de seguridad empezaron a circular por las redes sociales el pasado año.
"No estoy aquí para retratar a mi hijo como perfecto porque no lo es", ha afirmado, matizando, sin embargo, que este hecho no le hace culpable de los cargos más graves que enfrenta. También cree que hay quienes señalan a su hijo solo por beneficio propio. "Estas mentiras que le lanzan están motivadas por el beneficio económico, no por la justicia". "Les pido que piensen en aquellos que han sido injustamente perseguidos", ha zanjado.
