Gente

La relación entre Dani Alves y Joana Sanz se ha vuelto "muy desagradable": así están las cosas

El futbolista brasileño ha cumplido ya las primeras 48 fueras fuera de prisión. Refugiado en su casa de Esplugues de Llobregat desde que el pasado lunes depositara el millón de fianza que fijó la jueza, Dani Alves está acompañado por su madre y su hermano, que han viajado expresamente desde Brasil para abrazarlo, y algunos de sus mejores amigos. Eso sí, ni rastro de Joana Sanz. A la modelo, todavía esposa del condenado, ni está ni se la espera, porque la relación entre ellos ha dado un giro de 180 grados.

Si el pasado 6 de febrero la tinerfeña declaró a favor de Alves en el juicio y días antes había asegurado en una entrevista que lo apoyaría siempre, ahora no quiere saber nada de él. La insistencia del futbolista en reconciliarse con su esposa, a quien ha negado el divorcio, habría terminado con un enfado mayúsculo por parte de Joana, que no está dispuesta a convivir con él bajo el mismo techo: "Dani ahora está muy preocupado porque su relación con Joana Sanz se ha tornado muy desagradable", han asegurado en Así es la vida.

Tanto que incluso se ha instalado una cámara en el domicilio que compartían para controlar todas las entradas y salidas: "Esa ausencia de Joana Sanz en el domicilio es precisamente el motivo por el que hay una cámara dentro de la casa", han explicado. "Es una medida cautelar que recomienda la abogada de Alves. Dentro de la casa todavía hay pertenencias de Joana Sanz y la abogada le recomienda que queden constancia de todos los movimientos". Y añaden: "Joana Sanz no ha aparecido por la casa en ningún momento. Sí que estaba en la casa cuando Dani no estaba, pero una vez Dani sale de prisión y se instala allí, ni ha aparecido ni va a aparecer. No ha habido reconciliación y parece que ella no tiene ninguna intención de volver a casa ni estar con él".

Una fiesta familiar

Este miércoles, Dani Alves y su familia celebraron el cumpleaños del patriarca, Domingos, con una fiesta entre amigos que se alargó hasta bien entrada la madrugada.

El núcleo duro del brasileño lo apoya de manera incondicional. Joao Alcántara, uno de los amigos más cercanos de Alves, ha asegurado que no tirarán la toalla y seguirán luchando para demostrar la inocencia del futbolista: "Ahora tiene un trabajo por delante que es intentar probar que es inocente, como él ha dicho. Tiene muchas cosas que hacer, recuperar el tiempo perdido. Su trabajo mayor es probar que es inocente". También intentará restaurar su imagen pública después de perder su contrato con los Pumas de México y todos sus contratos de publicidad: "Seguirá manteniendo sus negocios en una agencia de representación de futbolistas y trabajando con su marca de gafas", afirma. "Él está fuerte, como siempre".

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBeloudBluesky