El año nuevo comenzó para Rafael Amargo con una huelga de hambre desde la cárcel. Fue el día 3 cuando tomó la decisión de no ingerir alimentos al considerar que era injusto que le denegaran sus peticiones de libertad provisional. Hay que recordar que ingresó en la cárcel madrileña de Soto del Real a comienzos de noviembre tras no acudir al juzgado a firmar y existir, según la justicia, riesgo de fuga.
Su esposa, Luciana Bongianino, ha desvelado ahora que el bailaor ya no se encuentra en huelga de hambre: "Ha tenido que abandonarla por motivos de salud. En diez días perdió 10 kilos y contrajo el Covid, por lo que era recomendable que dejara el ayuno. Nos tiene a todos muy preocupados", ha explicado en Pronto este lunes.
Mientras tanto, su equipo legal sigue trabajando en su defensa: "Su abogada está preparando nuevos documentos para llevarlos a la Audiencia Provincial de Madrid con el fin de presentar un nuevo recurso de súplica para que le concedan la libertad provisional y pueda esperar en el exterior a la celebración del juicio", añade la bailarina argenina.
Hace unos días, fue precisamente su nueva abogada la que transmitió a los medios que el artista estaba en huelga de hambre: "'El día 3 [de enero] tomó la decisión, el 4 lo comunicó, el día 7 yo fui a verle y ya estaba un poco demacrado, un poco mal y a partir de ahí dejo de llamarme y empezó a mandar a otros presos a llamarme (…) Le pesan todos los días para ver si está perdiendo peso de verdad o si está incumpliendo y le dijeron 'elige, o te mueres o dejas la huelga de hambre'".
Hay que recordar que el bailaor entró en prisión provisional el pasado 3 de noviembre tras no acudir al juzgado a firmar. El artista tenía que hacerlo cada quince días tras ser acusado de trafico de drogas en 2020 y ser investigado también por atentado a la autoridad.
La Sección 30 de la audiencia madrileña denegó el recurso de súplica que presentó el artista contra el auto del pasado 3 de noviembre por el que los magistrados acordaron la medida cautelar de prisión provisional comunicada y sin fianza hasta el juicio, previsto para abril de este año, entre los días 8 y 12.
En ese auto la misma Sección argumentó riesgo de fuga y quebrantamiento reiterado de la obligación de firmar cada 15 días en el órgano judicial, como defendía la Fiscalía, y envió a Rafael Amargo a la prisión de Soto del Real. También tomó la misma medida para otro de los tres procesados de cara al juicio, el productor Eduardo de Santos.
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