El Picasso de Jaime Ostos que aviva la guerra entre los herederos: Jacobo dice que no existe pero su padre habló de él

Hace ya dos años que el torero falleció pero la guerra por su herencia solo acaba de comenzar. Con cuatro hijos de tres relaciones diferentes y sin un inventario patrimonial, Jaime y Gabriela (hijos de Consuelo Alcalá) tiran dardos contra Jacobo (hijo de Mari Ángeles Grajal, viuda del diestro) por los enseres que, presuntamente, tanto él como su madre se han quedado sin dar opción a reparto. El último, un dibujo que Picasso le regaló al torero en los años 60. El DJ aseguró hace unos días que no existía tal dibujo, pero su padre habló de él poco antes de morir: "Me han ofrecido un millón de euros por él pero no lo vendo porque es para mis hijos".

Unas palabras que ofreció al diario latino El Espectador, el mismo que muestra las imágenes del dibujo y la dedicatoria del pintor: "Los toros son ángeles que llevan cuernos". Hace solo una semana, Jacobo Ostos aseguró en el programa de Sonsoles que no existía: "Si mi padre hubiera dejado un Picasso no estaría aquí sentado". Según los expertos, se trata de un dibujo original que, a día de hoy, valoran en unos 20.000 euros. "Picasso regalaba dibujos a los toreros que venían a Nimes. Con dedicatoria tiene un valor original menor".

El paradero del Picasso es desconocido, pues Gabriela, la encargada de ir a la casa de su padre para recoger sus enseres tras la muerte, no lo vio por ninguna parte: "Habían vaciado la casa. Yo fui con un camión a recoger cosas pero me llevé una mesita, un busto y poco más. No había nada", desveló. Su hermano Jacobo, sin embargo, discrepa: "Allí estaba todo y ella se llevó lo que quiso".

Los muebles, a la venta

La situación empeora porque Jacobo, además, ha puesto a la venta varios muebles de su padre. Son juegos de sofás y sillones que decoraban la casa en la que vivieron Jaime, Mari Ángeles y su hijo y que ahora, una vez vendida, han acabado en un portal de segunda mano.

Jaime, Gabriela y Gisela (fruto de un affaire entre el torero y Aurora Díaz) han contratado un equipo de abogados que están recopilando todas las pruebas necesarias para saber cuál era el patrimonio de su padre antes de morir. "Se ha repartido todo sin el permiso de los herederos", dicen.

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