Tres meses después de su boda, la marquesa de Griñón y su flamante esposo continúan estirando su romántica luna de miel. Este fin de semana, y casi recién llegados de Roma, Tamara Falcó e Iñigo Onieva disfrutaron de una romántica escapada a Ibiza y se alojaron en un hotel de lujo, ideal para buscar ese primer hijo que tanto desean.
"Es un remanso de paz y hemos tenido la oportunidad de conocer un Ibiza off season totalmente desconocido para nosotros", ha contado la propia Tamara desde redes sociales. Se trata de un resort situado en Cala Xarraca, a apenas 35 minutos en coche desde el aeropuerto de Ibiza con vistas al mar. La junior suite tiene una gran terraza privada con hamacas, ideal para aislarse del mundanal ruido. Eso sí, por casi 4.000 euros la noche.
Además, el matrimonio ha podido disfrutar de experiencias de bienestar y también gastronómicas, que tanto les gustan, porque el establecimiento ofrece cuatro restaurantes de autor que fusionan la cocina local e internacional, destacando la gastronomía ecológica, de temporada y de origen responsable.
Hace pocas semanas que Tamara retomó el tratamiento de fertilidad al que se somete para lograr cuanto antes el sueño de su vida: ser madre. A sus 41 años, la marquesa está muy ilusionada: "Vendrán cuando Dios quiera y ojalá quiera pronto. Ya estamos abiertos. Primero vamos a ir por la vía natural. Por eso me he preocupado de tener el cuerpo sano. Si después tenemos problemas, ya veremos".