Naomi Campbell ha estrenado una serie documental, The Super Models (Apple TV+) en la que no pasa por alto uno de los episodios más dolorosos de su vida: su adicción a las drogas en la década de los noventa.
"Me estaba matando", cuenta con el alivio de quien echa la vista atrás y ve que ha conseguido controlar una adicción que le estaba consumiendo. Al rememorar aquella etapa, la supermodelo de 53 años confesó que recurrió a la cocaína por vivir su infancia ligada a la soledad, ya que se crio sin conocer a su padre y sin poder ver a su madre.
Años más tarde, cuando consiguió habituarse a ese vacío, sufrió la pérdida de su amigo y diseñador de alta costura, Gianni Versace, asesinado el 15 de julio de 1997. "Él era muy delicado con mis sentimientos, pero me empujaba a dar otro paso adelante e ir más allá cuando yo pensaba que no tenía más fuerzas para hacerlo. Cuando falleció su dolor se volvió demasiado intenso", recordó la modelo británica.
Naomi, que ya había acariciado las drogas, colapsó durante una sesión de fotos en 1999. "Cuando estás intentando tapar algo (tus sentimientos) estamos hablando de abandono", confiesa en la docuserie.
Campbell tocó fondo y empezó una carrera hacia la recuperación. Para ella, el paso uno fue acudir a terapia. "Me estaba matando, era muy doloroso. Elegí ir a rehabilitación, fue una de las mejores y más importantes decisiones que pude haber tomado por mí en aquel momento", reconoce.
"Me ha llevado muchos años trabajar y poder afrontarlo", aseguró. "A veces, todavía reaparece, pero ahora tengo las herramientas para combatirlo cuando surge".