Varios audios de WhatsApp de una conversación entre la madre de Luis Rubiales y una amiga, durante las primeras horas de su huelga de hambre dentro de la iglesia de la Divina Pastora de Motril por la polémica del beso de su hijo a Jenni Hermoso, han sido publicados este martes por La Cope. Ángeles Béjar le dice a su interlocutora que el médico que la asiste le ha prohibido ver a nadie, porque además su cuñada está cuidándola en todo momento: "Ella entró conmigo y yo no puedo estar sola porque me puedo marear…"
Además, la progenitora del Presidente de Real Federación Española de Fútbol, actualmente suspendido de sus funciones por la polémica generada, ha hecho referencia a la misa que va a celebrarse este martes por la tarde, con lo que refuerza la indicación del doctor que la asiste a que no se rodee de mucha gente: "Me ha dicho el médico que me van a apartar ahora. Cuando digan la misa me van a quitar de aquí, para que no sepa nadie dónde estoy…"
Además, la emisora de radio también ha contado con el testimonio de una amiga que ha trasladado el sentir general del círculo más próximo de Luis. Esta ha sentenciado que "cualquier madre por un hijo hacemos cualquier cosa" y la opinión principal de la familia y los amigos de Rubiales es que no ha sido "una agresión sexual".
A por la segunda noche
Béjar se enfrenta en unas horas a la segunda noche de encierro y huelga de hambre dentro de la iglesia de Motril, a la que se enfrentará con el recuerdo del apoyo y calor recibido durante este martes por un grupo de personas a favor de Rubiales con carteles que solicitaban frenar la cacería mediática al canario y exigiendo a Jenni Hermoso "que diga la verdad".