Lo que fue una película de amor adolescente llega a su recta final. La diva del pop estadounidense, Britney Spears, y el actor, Sam Asghari, ponen fin a su relación tras 14 meses de matrimonio.
Las noticias corren como la pólvora. Prueba de ello, la viralidad de la exclusiva después de hacerse pública por el medio estadounidense TMZ. Tal y como informan desde este portal, ha sido Sam el encargado de pedir el divorcio a la intérprete de Baby One More Time este miércoles.
Lejos de comenzar los trámites de separación por una rutina que hace aguas, Asghari va más allá: "eran diferencias irreconciliables, apunta. El medio estadounidense desvela que el motivo del divorcio es una supuesta infidelidad por parte de la cantante.
Y aunque en el mes de junio fuentes cercanas al matrimonio aseguraban que "estaban mejor que nunca", diversos medios eran más partidarios de la otra versión: una crisis en la relación irremediable.
Ahora, que cada uno comienza su carrera personal por solitario, el actor ha solicitado a la estrella estadounidense que deposite los honorarios de sus abogados, así como la manutención del cónyuge. Mientras tanto, tal y como muestra Daily Mail, la icónica Britney Spears recorre Los Ángeles en su coche de lujo sin sus anillo de boda ni de compromiso. Por otro lado, él continúa dando pasos al frente y abandona la mansión familiar.
La relación termina después de siete años
Se conocieron en 2016 en el rodaje de la icónica canción de Britney Slumber Party. Las chispas del amor traspasaron la pantalla por el deslumbrante papel que protagonizó Sam, que hacía de su novio en el videoclip de la artista. Tan solo un año después de ese encuentro de película, su relación se hizo pública. En 2022, pasaron por el altar y, tan solo 14 meses después, el divorcio llegó en un matrimonio que ya hacía aguas.