MADRID, 8 (CHANCE)
Música, coreografías, luces y mucho movimiento han caracterizado la colección Primavera-Verano 2018 de Desigual presentada en la Fashion Week de Nueva York.
Una colección diseñada por el artista francés Jean-Paul Goude, quien acaba de fichar por la firma catalana y dejado ver su originalidad, con una forma de desfilar sobre la pasarela poco común para la industria de la moda.
El espectáculo comenzó con la irrupción de cuatro modelos coordinadas en el mismo baile, que continuó a lo largo de toda la presentación y no dejó indiferente a nadie. El desfile incluyó dieciséis propuestas de la colección cápsula Coture con el que el mismo diseñador afirmó a El Mundo "buscaba abogar por la diversidad cultural, el estilo chic urbano como forma de moda democratizada, la festividad, la originalidad, el ritmo y el humor".
Las faldas XL, tejidos vaqueros, jerseys de punto y kimonos resaltados por el peculiar maquillaje y peluquería en un ambiente étnico y tribal, marcaron un adelanto del optimismo de la nueva colección. Innovación sin alejarse del ADN propio de Desigual.