Parecía que Meghan Markle era totalmente aceptada por la familia real británica. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Ahora, la revista Star afirma que podría haber sido el propio príncipe Carlos el que le habría pedido a su hijo, en forma de ultimátum, que acabe la relación con su novia actriz para evitar "posibles escándalos".
Según esta publicación, la reina Isabel tampoco estaría demasiado contenta con Meghan como nuevo miembro de la familia. Al parecer, la madre del príncipe Carlos no aceptaría más 'plebeyas' en su corte.
La actriz, además, está divorciada desde 2013, algo totalmente inaceptable en la familia real británica. Otro factor que no agrada es su trabajo: a sus 35 años, Meghan es actriz, una profesión que la expone públicamente hasta límites insospechados, a pesar de haber dejado ya su trabajo en la serie Suits.
No obstante, otras informaciones apuntan que esto no es cierto y que realmente toda la familia apoya las decisiones de Enrique, quien actualmente lo que quiere es disfrutar del momento y ver cómo evoluciona este romance.
En cualquier caso, Markle parece ajena a todos los rumores. La intérprete está haciendo un alarde de elegancia manteniéndose al margen de todas las críticas y comentarios, siguiendo con su vida normal y familiar.
Meghan pasó el día de Acción de Gracias con su familia, tal y como compartió ella misma en redes sociales. Su última actualización en Instagram parece mostrar con palabras cómo se siente la actriz en este dulce momento. "No seas la razón por la que alguien se sienta inseguro. Se la razón por la que alguien se sienta visto, escuchado y valorado por todo el universo".