La hija de los eméritos está pasando unos días en el norte de España. Tras visitar a su padre en Sanxenxo a primeros de mes, doña Elena se trasladó a Cantabria, donde está disfrutando de una ruta por las localidades más pintorescas, lejos del calor que marbellí que achicharra a Froilán y Victoria Federica, habituales del Festival Starlite cada año.
A casi mil kilómetros de sus hijos, doña Elena vive un verano solitario pero feliz, como refleja la imagen que la alcaldesa de Santander ha compartido a través de las redes sociales. Gema Igual ha sido la encargada de dar a conocer la ruta turística de la infanta: "Un honor recibir en la ciudad a la infanta Elena de Borbón, que está recorriendo nuestra maravillosa Cantabria disfrutando de parajes como Cóbreces, Novales, Santoña, Santillana y Santander, además de la Colegiata de Santillana, el Cristo de Limpias y La bien aparecida".
Todavía queda verano por delante y no se descarta que la hermana del rey Felipe VI se traslade a Mallorca para pasar unos días en Marivent junto a su madre, doña Sofía, una visita habitual a la que suelen unirse sus hijos. Sin embargo, Froilán y Victoria Federica han disfrutado ya de las bondades baleares en compañía de amigos y no parece que vayan a regresar para regalarnos imágenes como las del año pasado, cenando en el puerto deportivo de Palma con sus primos Urdangarin.
A pesar de que se esperaba una gran reunión borbona en Mallorca este año, solo Felipe, Letizia y sus hijas reservaron unos días para cumplir con las tradiciones. En esta ocasión, la familia real visitó la sierra de la Tramontana y una granja escuela en Jovent. Además, cenaron con la emérita y su hermana Irene en la zona del Portixol.
