Ni Sanxenxo ni Palma. Estaba claro que Cristina no iba a pasar por Marivent. Tampoco por la Ría de Pontevedra, donde su padre, don Juan Carlos, regatea a sus anchas escoltado por su hija mayor, Elena. Por mucho que hiciésemos quinielas, esa fotografía de la infanta paseando por Puerto Portals con don Felipe a punto a embarcarse en el Aifos no se iba a producir. Muy lejos de Mallorca, en Grecia, la hija mediana de Juan Carlos I y doña Sofía ha decidido montar su cuartel general de verano junto a dos de sus hijos, Miguel e Irene. Así lo publica la revista Hola. Se da la circunstancia de que Cristina ha aterrizado en la isla griega de Spetses, muy al Sur del país heleno, que este mes de julio ha vivido un infierno de incendios. Grecia ha ardido, sobre todo, en la islas de Rodas, Corfú y Eubea.
Menciona la publicación, citando al periodista griego Andreas Megos, que Cristina llegó a la isla desde Porto Heli, localidad costera turística al sur del país. Acompañada por Alexia y su marido, Carlos Morales, se fueron al cine. También se unieron al plan sus respectivos hijos. En el idílico Porto Heli, Constantino de Grecia tenía su espectacular residencia. Una casa que vendieron él y su mujer, Ana María de Dinamarca, un año antes del fallecimiento del hermano de doña Sofía, el pasado enero. Se llegó a barajar que la operación inmobiliaria alcanzó los 12 millones de euros. Cristina ha tirado hacia las raíces maternas.
Arde Grecia
Precisamente este verano el país heleno y la zona del mar Egeo oriental viven en alerta forestal a causa de los devastadores incendios. El nivel de riesgo se ha reducido en las últimas horas, gracias al esfuerzo de 300 efectivos de bomberos y miles de voluntarios, que han trabajado en las tareas de extinción y evacuación. La tragedia forestal ha arrasado miles de hectáreas de bosques, tal y como informaron las autoridades. Como resultado, 30.000 personas evacuadas, entre ellas, 7.000 turistas. Lo más castigado, las islas de Corfú, Rodas y Eubea.