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Irene Urdangarin, más lejos que nunca de su padre: los motivos de su preocupante distanciamiento


Informalia

Cada día que pasa, la relación entre Iñaki Urdangarin y su hija pequeña, Irene, se vuelve más distante. Acabado el verano, y tras pasar unos meses en Zarzuela, la joven ha puesto rumbo a Inglaterra, donde inicia su etapa universitaria. En estas semanas ha sacado tiempo para despedirse de su novio, Juan Urquijo, así como de sus hermanos y de su madre, la infanta Cristina. Sin embargo, no ha ocurrido lo mismo con su progenitor. No ha existido una despedida -al menos, cercana- entre padre e hija.

El ex duque de Palma apenas tiene noticias de Irene, según explican a Monarquía Confidencial fuentes cercanas al entorno monárquico. "La relación entre Iñaki y Ainhoa Armentia no ha ayudado a reforzar el vínculo entre padre e hija. Irene siente que su padre en ciertos momentos se ha desentendido de ella, además de hacerle daño a su madre", cuentan.

Lo cierto es que este verano hemos visto a Iñaki y Ainhoa muy unidos, llegando incluso a ser fotografiados con la madre del ex jugador de balonmano. Mientras tanto, Irene hacía su vida en Madrid junto a su abuela, la reina Sofía. Después de su voluntariado en Camboya, la joven de 18 años se ha entrado en aprobar el carnet de conducir y en pasar tiempo con su chico, entre paseos por la ciudad, visitas al zoo y celebraciones familiares. También pasó unos días de vacaciones en la playa con su madre. Eso sí, ni rastro de un acercamiento efectivo con su padre.

Irene ha intentado en numerosas ocasiones acercar posturas con su padre tras haber pasado unos meses distanciados por discrepancias. Y, aunque el entorno de Cristina también afirma que el deportista también ha intentado calmar las aguas, la situación no ha mejorado. "Ambos lo han pasado mal. Irene no deja de ser una adolescente que ha visto a su madre pasarlo mal, y también a su padre, sobre todo cuando estaba en prisión", informan. "Ahora es una nueva etapa en la vida de ambos. Irene está intentando entender que la relación matrimonial con su padre debe ser distinta a la suya como hija".

No obstante, la relación entre Irene con Juan, Miguel y Pablo, aseguran, es excelente. Y lo mismo ocurre con su madre y su abuela. "Su mayor apoyo, además de sus hermanos, han sido su madre y sobre todo la reina Sofía quien se tomó un interés personal en ayudar a su nieta".

El futuro de Irene: ¿Cómo lo costea?

Irene estudia en el University College London (UCL), cuya matrícula no es apta para todos los bolsillos. Cuesta entre 120.000 y 150.000 euros, dependiendo de la carrera que elija, a razón de 30.000 euros al año, solo de matrícula sin contar los gastos de manutención, estancia, o los viajes que haga.

A Ginebra para ver a su madre o a Madrid. Por supuesto, si la relación funciona, también visitará nuestro país para reencontrarse con su chico. En Vitoria está su padre -en el caso de que quiera ir a verlo-, y en Barcelona, su ciudad natal, se reencontrará con su hermano Pablo y su tía doña Elena. Quién sabe si también le dará por viajar a Abu Dabi, destino al que las infantas han viajado más de 60 veces (que sepamos) desde que el abuelo Emérito se encuentra allí (unos 50.000 euros solo en billetes de avión).

Tal y como nos confirmaron fuentes de toda solvencia, Irene no ha accedido a la universidad con ninguna beca, así que alguien -no sabemos quién exactamente- tendrá que abonar la fortuna que cuesta estudiar en el centro, donde coincidirá con la princesa Alexia de Holanda. La segunda hija del rey Guillermo coincidió con la princesa Leonor en el UWC Atlantic College, de Gales, donde cursaron bachillerato. Ahora estamos hablando de una de las universidades más reconocidas a nivel mundial, aunque no de las más caras.