Iberdrola
Iberdrola, entre las eléctricas más sostenibles
Concha Raso
Con más de 170 años de historia, Iberdrola es una de las mayores eléctricas del mundo y un referente en renovables, con 26.000 megavatios de capacidad renovable, de los que 14.700 megavatios son eólicos. La compañía, que actualmente produce y suministra electricidad a unos 100 millones de personas, se ha marcado como objetivo la creación de valor de forma sostenible en el desarrollo de sus actividades mediante un servicio de calidad a la sociedad, sus clientes, trabajadores, y accionistas y otros grupos de interés.
Su firme compromiso con la sostenibilidad le ha llevado a crear toda una estrategia en torno a este pilar básico para la compañía, que da respuesta a los principales retos económicos, ambientales y sociales de su política energética, y que le está valiendo el reconocimiento a nivel nacional e internacional. En esta línea, la compañía que preside Ignacio Sánchez Galán, ha sido designada como la mejor empresa del sector eléctrico dentro del prestigioso Índice Dow Jones de Sostenibilidad (DJSI) -principal referente global para medir la aportación de las compañías al desarrollo sostenible-, con una puntuación global de 91 puntos en la edición 2016.
El DJSI ha reconocido a Iberdrola por sus políticas enfocadas, entre otros objetivos, a luchar contra el cambio climático, invertir en renovables, desarrollar el capital humano, cuidar de la biodiversidad, implicarse con los grupos de interés, gestionar la cadena de suministros, atraer y retener el talento e implantar códigos de conducta.
Iberdrola, la única eléctrica europea incluida en las 17 ediciones del DJSI, también ha conseguido estar de nuevo entre las nueve eléctricas más sostenibles del mundo, por su enfoque estratégico basado en el crecimiento internacional y el desarrollo de las renovables. Asimismo, ha sido reconocida por CDP -organización sin ánimo lucro que impulsa el desarrollo de modelos económicos sostenibles- como compañía líder global en la lucha contra el cambio climático e incluida de nuevo en el índice Climate Performance Leadership -conocido como Lista A-, que elabora esta institución y cuyo informe ha dado a conocer hace menos de un mes y ha obtenido la mejor puntuación entre las empresas analizadas en la región Iberia.
Para ello, CDP ha preguntado a 827 inversores que gestionan activos por valor de 100.000 millones de dólares, de cuyas respuestas se ha concluido que son 193 las compañías de todo el mundo -entre las que figura Iberdrola- que cumplen los requerimientos necesarios para estar presentes en este índice, lo que representa un 9% de todas las candidaturas. En el informe se pone de manifiesto cómo las grandes empresas han comenzado ya la transición hacia una economía baja en carbono, así como a aprovechar las oportunidades que esta evolución ofrece.
Objetivos sostenibles
Iberdrola ha incorporado los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) -definidos por Naciones Unidas para el horizonte 2015-2030-, a su estrategia empresarial y a su política de sostenibilidad, convirtiéndose en referente por su contribución directa a los objetivos globales, destacando sus aportaciones en el campo de la energía y el cambio climático.
En este sentido, la empresa está comprometida a garantizar el acceso a una energía segura y sostenible, enfocando esfuerzos al suministro de energía segura y no contaminante, que le ha convertido en líder mundial en eólica. Además, gracias al programa Electricidad para Todos, se ha dado acceso a suministro eléctrico a más de 1,5 millones de personas en países en desarrollo, con el objetivo de alcanzar los 4 millones en 2020.
Por otro lado, en su compromiso con la reducción de emisiones para combatir el cambio climático y avanzar hacia la descarbonización de la economía, la empresa se ha fijado como nuevo objetivo medioambiental lograr en 2030 una reducción del 50 por ciento de su intensidad de emisiones de CO2 sobre los niveles de 2007 y ser neutra en carbono en 2050.
El Manifiesto contra el cambio climático de Iberdrola, presentado en la Cumbre del Clima de París de 2015, sienta las bases de la compañía para frenar el calentamiento global. Además de su ambicioso objetivo de reducción de emisiones, la empresa plantea la necesidad de impulsar las tecnologías renovables sostenibles y eficientes.
Pionera en energías limpias
Iberdrola, que fue pionera en su apuesta por las renovables, se ha convertido en líder mundial en este sector. Las Perspectivas Estratégicas de la compañía para el periodo 2016-2020 contemplan unas inversiones totales de 24.000 millones de euros, de los que un 33% -7.920 millones de euros- se destinará a la puesta en marcha de nuevas instalaciones renovables.
Para este periodo, una de las principales áreas de negocio en crecimiento será la eólica marina, en la que la compañía desarrolla importantes proyectos, tras convertirse en 2014 en la primera empresa española en proyectar y poner en marcha el parque eólico West of Duddon Sands, en el Mar del Norte.
Actualmente, construye el parque alemán Wikiner -de 350 megavatios de potencia- y ha presentado a las autoridades del país los primeros permisos para la construcción del parque Windanker, de 252 megavatios, que podría estar en marcha en 2023.
Iberdrola, que ya dispone de la autorización del Gobierno francés para construir el parque Saint-Brieuc en aguas de la costa de Bretaña, con una potencia de 496 megavatios, también desarrolla el de East Anglia One -en aguas del Reino Unido-, con 714 megavatios de potencia, que suministrará energía limpia a más de 500.000 hogares ingleses. La compañía ha solicitado al Gobierno británico ampliar esta instalación hasta los 2.000 megavatios. Para ello, ha presentado a las autoridades del Reino Unido una propuesta para construir el parque East Anglia Three, que dispondría de 1.200 megavatios de potencia.
La eléctrica también se ha precalificado para construir dos parques en la costa de Nueva York, con una potencia de 200 megavatios, que puede ampliarse con las subastas de otros Estados que se están desarrollando en estas fechas.
Plan de movilidad sostenible
Otra de las acciones desarrolladas por la compañía en favor de la sostenibilidad es el Plan de Movilidad Sostenible para un uso racional de los medios de transporte, que se encuentra en línea con el compromiso adquirido por la compañía en su Política de Sostenibilidad, aprobada en 2013. Este Plan, que cuenta con una inversión de 1,3 millones de euros, tiene un carácter integral e involucra a empleados, empresa, clientes y proveedores. El programa se articula en torno a 23 acciones concretas, con las que Iberdrola busca reforzar su apuesta por la sostenibilidad.
Una de las iniciativas -Vehículo Eléctrico para Empleados- se centra en la promoción del vehículo eléctrico entre su plantilla, a la que se han acogido un total de 60 profesionales de la compañía en España y Reino Unido.
Para ello, se han articulado tres tipos de mecanismos: anticipos especiales de hasta 4.000 euros para la compra de un vehículo con cero emisiones locales, ayudas a fondo perdido de hasta 500 euros para la instalación de puntos de recarga, y de hasta 6.000 euros para aquellos empleados que accedan al patrocinio de la marca Iberdrola en sus vehículos durante tres años.
Estos incentivos son compatibles con el Plan Movea del Gobierno, por lo que los empleados de Iberdrola pueden acceder a un vehículo eléctrico a un precio realmente competitivo. De los 60 empleados que han apostado por el vehículo eléctrico, 48 están en España y los otros 12 en Reino Unido. Respecto al tipo de transporte elegido, 42 de estos profesionales han adquirido un turismo y 18 se han decantado por bicicletas y motocicletas eléctricas.
Otra de las iniciativas destacadas en este contexto es el servicio de coche compartido eléctrico, por el que casi 350 empleados de la compañía en España disponen de vehículos respetuosos con el medio ambiente para realizar gestiones comerciales en las localidades de Madrid, Bilbao, Valencia y Barcelona.
Además de a sus empleados, el grupo también quiere implicar en este Plan de Movilidad Sostenible a sus clientes y proveedores. Para los primeros, la compañía ofrece el Plan Movilidad Verde, que pone a disposición de sus clientes una solución integral de movilidad con cero emisiones, que combina vehículo eléctrico con punto de recarga verde y energía certificada 100% renovable.
Para ellos también está disponible el servicio de factura electrónica, con el que se evita el gasto en papel y tinta, además de las emisiones derivadas de los desplazamientos para entregar las facturas. Además, dentro de su compromiso con la creación de valor en las regiones en las que opera mediante la contratación de proveedores locales, Iberdrola también quiere fomentar la movilidad eléctrica entre sus suministradores.