El lujoso restaurante tiene lo necesario para sumar otro estrella a la lista del chefLo más divertido de cada nueva edición de la Guía Michelin son los rumores y apuestas sobre dónde irán a parar las nuevas estrellas. Y aunque los designios de la guía roja son imprevisibles, vamos a jugar: Terra, el restaurante de Paco Pérez en el lujoso hotel Alabriga de Sant Feliu de Guíxols (Girona) conseguirá dentro de unas semanas su primera estrella. Y si nuestro entusiasmado pronóstico tras visitar esta casa falla, no pasa nada. Se seguirá comiendo igual de bien, sume o no Pérez -sería la sexta si no cae la tercera para Miramar- otra estrella a su cuenta. Y es que la de Terra es una propuesta tan canónica como singular. En un entorno donde manda el lujo, nos topamos con una cocina aparentemente más sencilla que en otros restaurantes del chef, y en la que el producto y el Mediterráneo -estamos a pie de mar- imponen su discurso sobre una técnica impecable e imperceptible. El espacio impresiona: comedor espectacular -tal vez algo frío por sus dimensiones- y con vistas a una cocina que se adivina también in-mensa, y una bodega que invita a pasar allí unas horas, descubriendo los tesoros que guarda el sumiller Miguel Cabrera, entre las 1.000 referencias. ¿Y qué se come en el restaurante de uno de los hoteles más lujosos del país? Puede parecer una licencia poética enfrentar lo exclusivo con lo aparentemente sencillo, pero las espardeñas con tripas de bacalao y garbanzos ligados con un pil pil no solo es uno de los platos más logrados, sino que resume muy bien la esencia de Terra. Mar y montaña en forma de cocochas y tendones -untar es casi obligatorio- o un delicioso canelón de gambas y caviar son algunos de los ejemplos de esta cocina sofisticada, pero cercana, que a veces tanto se echa de menos en los gastronómicos. Los dos arroces de la carta (de carabineros y alcachofas y socarrat de chipirones y gambas) son también una declaración de intenciones y de mediterraneidad de una cocina que, quien ya haya pasado por Miramar, debería visitar para completar el círculo de uno de los mejores chefs del país. Servicio eficaz y atento, a la altura del lugar, y, además de una carta de vinos muy completa, propuestas de maridajes pensadas para hacer disfrutar al comensal y descubrir, si apetece, cosas nuevas. Además de la carta y menú degustación (150 euros), cada mediodía hay opción de menú ejecutivo (35 euros y 55 euros). Cocina, espacio, servicio y vino. A veces no hay que inventar nada, sino asentar bien esos cuatro pilares. Y en Terra, pese a su relativa juventud, lo han conseguido, hasta el punto de ser ya un referente en la Costa Brava.