Fútbol

Zidane da la puntilla a Isco y James: el adiós de ambos, cada vez más claro

  • El malagueño salió apenas un minuto y para perder tiempo
  • James sólo calentó la banda pese a haber jugado apenas 15' ante el Rayo
James e Isco celebran un gol del malagueño en Getafe en uno de sus últimos partidos juntos. Imagen: Reuters

EcoDiario.es

El empate a cero entre Manchester City y Real Madrid en la ida de las semifinales de la Champions League deja lugar a muchas conclusiones. Pero una de las más importantes, de las que empieza, por repetición, a consolidarse en el ideario merengue, es que Zinedine Zidane no cuenta ni con Isco, ni con James Rodríguez.

En el partido de ayer ninguno de los dos gozo de protagonismo alguno. Bueno, Isco sí, pero fue más un protagonismo residual, enfocado a perder tiempo en los minutos finales del partido.

El del Arroyo de la Miel salió a falta de 60 segundos para que acabara oficialmente el tiempo reglamentario. James, ni eso. El colombiano se quedó en el banquillo y de ahí no salió más que a calentar.

El duelo, sin embargo, sí que dio oportunidades para verlos jugando. Las dio desde el inicio, cuando Cristiano Ronaldo fue descartado definitivamente si quiera para entrar en la lista de convocados. Lucas Vázquez fue, sin embargo, su sustituto. Luego también se resintió Benzema, pero el elegido para suplir al francés fue Jesé Rodríguez.

El canario jugó un buen partido, aunque en el momento de la sustitución, el escogido para entrar al campo bien podría haber sido un mediocampista. La medular blanca había perdido casi por completo el control del duelo en una primera parte que dominó (al menos en cuanto al balón) el City.

Pero no. Zidane no escogió ni a Isco (que venía de hacer una gran partido en Vallecas), ni a un James que ante el Rayo sólo había competido 15 minutos.

La lógica de las bajas dice que los dos competirán en San Sebastían, frente a la Real, este sábado a las 16:00 en un partido clave para la Liga, pero que, sin embargo, no servirá de consuelo a ambos extitulares.

Todo apunta a que, salvo sorpresa, el mercado de verano les espera con las puertas abiertas. Queda sólo por resolver si será ambos o solo uno de los dos el que abandonará el Real Madrid.