Fútbol
El Real Madrid, dispuesto a romper el pacto de no agresión con el Atlético
EcoDiario.es
El Real Madrid está interesado en hacerse con los servicios de José María Giménez, defensa uruguayo del Atlético de Madrid. Un interés que podría ir más allá de un simple sondeo. Filtran desde el Bernabéu que estarían dispuestos a abonar hasta 65 millones de euros por su fichaje, el valor de su cláusula. Esta operación, más allá de su interés deportivo, supondría un hito en la relación reciente entre los dos equipos más importantes de la capital. Sería la prueba definitiva de que el pacto de no agresión que ambos habían respetado en los últimos tiempos ha saltado por los aires.
Paso a paso, metro a metro, las distancias entre ambos clubes se han ido haciendo más grandes alimentadas por polémicas colaterales a las del mercado de traspasos, como la del modelo de venta de derechos de televisión.
Fue este asunto el que provocó un episodio de alta tensión en la comida de directivas previa al derbi de la primera vuelta. Florentino Pérez amenazó incluso con no acudir al palco del Calderón.
Finalmente sí estuvo, pero ese gesto se considera un momento de no retorno que tensa las relaciones entre los dos equipos más importantes de la capital. Algo que, traducido a sus consecuencias deportivas, significa que el Real Madrid ya no se andará con contemplaciones a la hora de fichar futbolistas colchoneros.
Si el Atlético se niega a dejarlos salir, la vía de la incorporación mediante el pago de la cláusula será una alternativa más como sucede con otros clubes. Si finalmente se confirmase algunas de estas operaciones, el ambiente entre ambas instituciones se caldearía mucho y echaría atrás el 'buen rollo' de años recientes.
Sin 'agresiones' recientes
Un pacto de no agresión que, por ejemplo, evitó que el Kun Agüero vistiera de blanco. El Real Madrid (sobre todo su presidente, Florentino Pérez) quería hacerse con sus servicios en 2011. Los blancos sondearon las posibilidades de verlo jugar con la zamarra merengue e incluso el propio futbolista se declaró en rebeldía para salir del Calderón rumbo al Paseo de la Castellana.
El problema es que Florentino Pérez frenó cualquier operación ante la negativa colchonera de venderlo. Su adiós al eterno enemigo sólo podría ejecutarse por la vía de la cláusula de rescisión.
El Real Madrid podría haberla abonado, pero su presidente frenó esta posibilidad porque ya le había prometido a sus homólogos colchoneros que no haría nada que pudiera molestar en la ribera del Manzanares. Y así, defraudado con los blancos, Agüero tuvo que buscarse un plan B; acabó en el Manchester City.
La grieta de Falcao
Poco a poco, sin embargo, el panorama ha ido cambiando. Ya lo hizo, por ejemplo, a propósito de Falcao. El Real Madrid también preguntó por el colombiano y en el Atlético contestaron que estaban dispuestos a dejarlo marchar si se abonaban los 60 millones de euros que costaba su cláusula de libertad.
El Real Madrid entendió que era un precio exagerado y empezó a mostrarse molesto con la actitud rojiblanca, toda vez que los colchoneros sí que darían luz verde a su marcha a otros equipos por una cantidad menor. Ya sucedió con Agüero. El Kun fichó por el City por apenas 36 millones de euros (lo ha demostrado Football Leaks) frente a los 45 que filtraron en su día desde el Calderón.