Fútbol

Rafa Benítez podría ser despedido hoy como entrenador del Real Madrid

    Rafa Benítez saluda a Mestalla antes del partido. <i>Imagen</i>: EFE

    EcoDiario.es

    Rafa Benítez, entrenador del Real Madrid, podría ser despedido hoy como técnico blanco después de que su equipo desaprovechara ayer, en Mestalla, el pinchazo del Barça en Cornellá. Los merengues empataron a dos frente al Valencia y siguen descolgados de una cabeza de la tabla que lidera el Atlético de Madrid, seguido de cerca por el propio Barça. Los de Luis Enrique, de ganar el partido que le queda pendiente por el Mundial de clubes, podrían distanciarse más si cabe de su eterno enemigo y ahondar en la herida abierta en el Santiago Bernabéu.

    Según relata la Cadena Cope, Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, se ha pasado la noche meditando qué hacer con Benítez, esto es, si forzar su salida hoy mismo (opción que en el seno de la directiva no descartan en absoluto) u otorgarle una semana más de confianza, hasta el próximo sábado cuando, a las 20:30, el conjunto de Concha Espina reciba al Deportivo de la Coruña en su feudo.

    En caso de que finalmente el presidente decida que lo mejor es prescindir del técnico, la mecánica que seguiría el club sería sencilla. En primer lugar, se convocaría a los directivos a una reunión extraordinaria de la junta. Este encuentro se celebrería por la tarde y tras él, Florentino Pérez hablaría en rueda de prensa para dar a conocer la noticia.

    Los plazos habituales en la capital apuntan a una posible comparecencia en torno a las 19 o 20 horas. En esa misma comparecencia se podría anunciar el nombre del posible sustituto. Zidane, técnico del Real Madrid Castilla, es a día de hoy el que más opciones tiene de suplir al madrileño si cesa de sus funciones.

    La deriva de las últimas semanas no hacen ser optimistas a un Benítez ha afrontado dos exámenes en apenas cuatro días. El primero, frente a la Real Sociedad, acabó bien, aunque tuvo momentos de tensión cuando los txuri-urdin empataron el duelo y amenazaron con llevarse los tres puntos. Sólo los penaltis pitados por el colegiado y el acierto de un Cristiano enchufado salvaron el cuello a su preparador.

    Ayer en Mestalla también se rozó la tragedia. Los madrileños estuvieron a punto de perder frente a un pobre Valencia que tuvo en las botas de Negredo la ocasión de vencer y provocar la crisis blanca. Pese a la debilidad ché, el Madrid no supo dominar los tiempos del choque, sentenciar al contrario o mostrar una actitud constante durante los 90 minutos. Kovacic fue expulsado y a cambio, Benítez sentó a Benzema (uno de los mejores del partido) por Lucas Vázquez. Fue el único relevo del choque.

    Isco y James fueron suplentes pero no jugaron en lo que supone la confirmación del divorcio que mantienen ambos jugadores (y por extensión, toda la plantilla) con su técnico. Suma y sigue en el debe negativo de un entrenador cada día más cerca de su despido.

    Sólo un cambio positivo y prolongado en los resultados obrarían el milagro de mantenerlo. Eso siempre y cuando hoy mismo no se decida su salida.