Fútbol

Plantilla y directiva del Real Madrid se alían frente a Benítez por su trato a James

    James, en un partido reciente. <i>Imagen</i>: EFE

    EcoDiario.es

    La situación de James Rodríguez en el Real Madrid, lejos de aclararse, sigue complicándose. El colombiano de nuevo salió harto de un terreno de juego cuando, el domingo pasado, su técnico, Rafa Benítez, le sacó el primero del terreno de juego. Sólo ha disputado un partido completo este curso y su relación con el entrenador es algo más que tensa. Un conflicto en el que ha encontrado como aliados al resto de la plantilla y los directivos. Nadie en el Bernabéu comprende el trato que Benítez da al '10' del equipo blanco.

    Cuenta hoy el diario Marca que ambos colectivos están más que sorprendidos con todo lo que le está sucediendo al colombiano. El motivo fundamental, revela el rotativo, es que el futbolista ex del Oporto o el Mónaco es, según el criterio de unos y otros, algo más que titular. 'Titularísimo', que diría Manuel Pellegrini.

    De hecho, en la planta noble del Bernabéu hay voces que lo colocan como el mejor jugador del equipo por delante incluso de Cristiano Ronaldo o de Bale, de Benzema o de Sergio Ramos. Otras voces no creen que esté aún en esta posición, pero sí que llegará.

    Es, afirman, un potencial candidato a ganar el Balón de Oro como, en su día, también tildaron a Benzema u Özil. Ahora que CR7 parece bajar el pistón, su apuesta es clara: James es el futuro. El problema es que todavía no es el presente. No para un Rafa Benítez que sigue sin darle el protagonismo él (y sus compañeros) querrían.

    Un plantel que está más sorprendido si cabe ya no solo por las suplencias, sino por el hecho de que, frente al Shakhtar o el PSG no jugase ni un minuto. Mañana, en Copa, la lógica dice que no jugará de inicio en el Carranza, frente al Cádiz. Es posible que no vaya incluso ni convocado.

    Sea como fuere, las miradas volverán a posarse sobre él cuando este sábado se sepan las alineaciones previas al Real Madrid - Getafe. Su presencia o no el once podría agravar más si cabe esta crisis o, por el contrario, calmarla.