Los salarios ahogan al Barça y acercan su directiva a un 'precipicio' financiero

El FC Barcelona tiene un problema: los salarios de sus jugadores le están ahogando. A día de hoy el volumen total de esos sueldos implican el 73% de sus ingresos, esto es, tres puntos más de lo que permite la UEFA con sus reglas del 'fair-play' financiero. Aunque desde el club llaman a la tranquilidad, lo cierto es que las cuentas no terminan de salirle a la nueva directiva de Bartomeu. El club ha visto como su deuda neta ha pasado de 287 millones en 2014 a los 328 millones actuales, frenando la tendencia bajista iniciada por Sandro Rosell y acercando al club a un 'precipicio financiero' que deja a sus nuevos mandatarios ante el riesgo de una dimisión forzada.

Dimisión porque, cuenta hoy el diario El País, los estatutos reformados precisamente por Rosell fuerzan a que a partir de 2018 sea obligatorio que la relación entre el Ebitda y la deuda sea de 2,0. Actualmente es de 3,2.

En el club, con todo, venden tranquilidad. La facturación es elevada (608 millones de euros en 2014, 633 previstos para 2015) y el hecho de que este curso se termine de pagar el crédito sindicado son parte de los argumentos esgrimidos desde las oficinas del Camp Nou.

La oposición, con todo, insiste en deslizar que el curso pasado también se incrementaron los gastos en un 23% y que el beneficio se redujo de 41 millones de euros a 15.

Esta suma de factores, además de amenazar con una posible sanción de UEFA por superar las barreras del Fair-Play financiero, también podría entorpecer algunas de las operaciones de fichajes y renovaciones puestas en marcha. Entre ellas, las incorporaciones del mercado invernal (Nolito, Negredo, Coutinho...) o las ampliaciones de contrato de Rafinha y Neymar entre otros.

Cabe recordar que el Barça tiene entre sus integrantes algunos de los jugadores mejor pagados del planeta, como Messi (25 millones netos por curso) o Neymar (8 millones netos por temporada).