Los intocables del Real Madrid mitigan la política de rotaciones de Rafa Benítez

Rafa Benítez, entre otras cosas, llegó al Real Madrid con el objetivo de hacer más útil su plantilla, de alargar su fondo de banquillo. A esta tarea se ha dedicado en los primeros meses en el cargo, ofreciendo las primeras señales y actuando en consecuencia. Sin embargo, en un club como el blanco, esto tiene sus dificultades. No todo el mundo tiene el mismo estatus, y parece haberlo asumido.

En la rueda de prensa previa al partido de Champions contra el Shakhtar, el técnico ha descartado que haga las rotaciones por decreto y ha asegurado que lo hará en función de las circunstancias. Hay algo que encaja en el discurso de Benítez, y es que hay ciertos jugadores que podrían escapar a las rotaciones de forma continuada y quedasen a expensas de partidos de bajo nivel competitivo para formar parte de ellas.

En la línea de la portería hay dudas, aunque parece que Keylor Navas va a ser el portero titular del equipo. Solo queda saber si su tiranía en la titularidad también se extenderá al resto de competiciones, algo verosímil si se echa la vista atrás en el tiempo, con el ejemplo de Iker Casillas el pasado curso en el recuerdo.

En la defensa, hay dos jugadores que se elevan por encima del resto y que a día de hoy son imprescindibles: Sergio Ramos y Marcelo. El central es el capitán, el líder blanco tras Cristiano. Solo ha bailado el puesto de su acompañante, con dos partidos para Varane y uno para Pepe. Respecto al lateral zurdo, el '12' es uno de los arquitectos del juego blanco y su trascendencia se acentúa más por la ausencia de sustitutos.

A este respecto, Benítez ha dicho que hay jugadores como Arbeloa, Nacho, Carvajal o Danilo que pueden hacer las funciones de Marcelo. En el fondo, se tratan de soluciones de emergencia, ya que son cuatro jugadores que se mueven en otras zonas del campo, aunque con algo de experiencia en el flanco izquierdo.

Para ver los siguientes indiscutibles hay que acudir a la zona de ataque. Ahí están James, Bale y Cristiano Ronaldo. En cuanto a los tres, hay poco que se pueda decir de ellos. James (ahora K.O. por una lesión muscular) ha sido el motor del equipo cuando el cuerpo le ha dejado, y Bale y Cristiano son irrenunciables. Solo queda Benzema, al que el míster le ha pedido más goles (resuena aún en la mente del galo esa cifra de 25 tantos) y que frente al resto de jugadores ofensivos no tendría ese carácter de imprescindible.

En definitiva, hay un mínimo de cinco jugadores que difícilmente estarán en la política (Benítez niega que ésta exista) de rotaciones. Otros como Pepe, Varane, Carvajal, Modric o Kroos ya han comenzado a tener minutos de oxígeno. Pero los intocables están hechos de otra pasta.