Arda Turan crea una 'guerra civil' en el Barça con Luis Enrique de protagonista

El Barça se encuentra inmerso en una silenciosa guerra civil. Y Arda Turan es el culpable de todo. Hoy lunes la junta gestora del club blaugrana que rige sus designios en el presente periodo electoral decidirá si ficha o no al turco. El presidente de este órgano transitorio, Ramón Adell, es contrario al movimiento por entender que sobre pasa sus funciones. El resto de la junta, cercana a Bartomeu, está en contra de Adell y votará en la reunión de esta tarde (19:00) a favor de esta incorporación.

Cuenta Mundo Deportivo que la mayoría de estos directivos votarán que 'sí' y lo harán hostigados por el propio Bartomeu y por un Luis Enrique que insiste en fichar al '10' del Atlético de Madrid.

Entre tanto, tres de los ya oficialmente candidatos a la presidencia se niegan a que la junta sobrepase sus funciones para realizar este movimiento. Benedito, Freixa y Laporta han solicitado que el club no acometa el traspaso o lo posponga hasta el día 19 de julio, fecha en la que se sabrá quién es el nuevo dueño del sillón presidencial.

¿Qué sucederá finalmente? La incógnita sigue en el aire, pero la mayoría de las previsiones apunta a que se impondrá la opinión de la mayoría de los miembros de la junta gestora y que el Barça dará luz verde al fichaje de Arda. De no ser así, si el Barça dijera que aplaza su decisión, lo normal es que Arda no esperase al club catalán y acabase, finalmente, en la Premier League.

El futbolista y el Atlético de Madrid dieron a los culés un ultimátum para acometer el fichaje. Hoy es cuando expira ese plazo por el club los blaugrana podrían hacerse con este mediocampista creativo por 35 millones de euros, 6 menos de los que fija su cláusula de rescisión.

El inminente comienzo de la pretemporada atlética es el punto de no retorno para un jugador que no desea ponerse de nuevo bajo las órdenes de Simeone. Así las cosas, si no acaba en el Barça, se irá a otro equipo. Todo con tal de no entrenar de nuevo con el Atlético.

Es por ello que el agente del futbolista y el Atlético de Madrid están metiendo presión a la junta gestora para que tome una decisión en la que Luis Enrique es clave. Es el único jugador que ha solicitado esta temporada más allá de Vidal.

Dicho de otro modo, con la llegada de Arda, la plantilla del Barça quedaría cerrada y lo haría, tal y como quiere lucho, antes de que comenzase la pretemporada.

Un aspecto vital que convierte en este asunto un movimiento delicado que divide al barcelonismo toda vez que se considera, además, una acción electoralista por parte de un Bartomeu que se apuntará seguramente el tanto de esta incorporación. De ahí que los contrarios al presidente saliente se nieguen a que el club ate a Turan. Algunos de ellos, como Benedito, ni si quiera quieren al futbolista. En sus planes electorales figuran otros jugadores que incorporar a la disciplina culé.