El aviso a navegantes de James Rodríguez

Estuvo de baja dos meses, pero a Carlo Ancelotti se le hizo más largo todavía. En la primera oportunidad que tuvo de alinearle, le alzó a la titularidad, y él respondió con una gran actuación. En paralelo al show de Cristiano, James Rodríguez cuajó un gran partido, salió ovacionado del Bernabéu y lanzó un aviso a navegantes: dejarle fuera del once será complicado.

En su vuelta al césped, el colombiano brilló en lugar de Isco (sancionado) y en su sitio habitual en los meses anteriores: el flanco izquierdo del centro del campo. En ese sector, acompañado de Marcelo, brotó buena parte del fútbol del Real Madrid. El '10' encontró buenas conexiones con el tridente ofensivo y dejó dos asistencias: una, de mucha clase, a Cristiano; otra a Benzema, en un saque de esquina.

Así, más de cuatro meses después, el Real Madrid volvió a tener su centro del campo aparentemente titular. Kroos estuvo a un nivel más bajo, Modric ejerció de verdadero motor (fue el jugador con más recuperaciones de todo el partido, nueve) y James aportó todo lo que se le pidió desde su llegada a la capital.

Fue el futbolista de la medular con más manejo de balón, y tuvo un buen porcentaje de acierto en los pases (un 86%). No dejó de lado el aspecto defensivo (recuperó cuatro balones, solo superado por Modric y Marcelo) y se prodigó en ataque, con un 75% de éxito en el regate (tres de cuatro). Solo realizó un disparo, pero a cambio regaló dos asistencias.

Sus números hablan de un jugador con relevancia en el Real Madrid: suma 12 goles y otras tantas asistencias en lo que va de temporada. Después de la intocable 'BBC', es el cuarto anotador del equipo. Argumentos que valen para una titularidad que Ancelotti nunca le negó cuando estuvo al cien por cien físicamente.

Ahora, la situación es diferente porque, por primera vez en el curso tras la explosión definitiva de Isco, los cuatro futbolistas del centro del campo se encuentran en perfectas condiciones y Ancelotti deberá dejar a uno fuera del once por cuestiones meramente técnicas. En previsión de esto, James ya ha lanzado un aviso: su suplencia está muy, muy cara.