El guión de Carlo Ancelotti aplana al Real Madrid

El Clásico le fue de perlas al Real Madrid hasta el minuto 55, cuando Luis Suárez hizo el 2-1 y desequilibró al equipo de Carlo Ancelotti, que a partir de ahí ya no fue el mismo. Los cambios del italiano no arreglaron la situación e incluso la empeoraron, una dinámica que se ve en los últimos partidos en los que ha tenido que luchar contra resultados adversos.

A lo largo del mes de marzo, el Real Madrid se ha enfrentado a tres partidos de Liga en los que ha tenido situaciones desfavorables. En ninguno de ellos Ancelotti pudo enmendar la situación con los cambios. Villarreal, Athletic y Barcelona mantuvieron la ventaja.

Los tres partidos de Liga dejaron siempre los mismos cambios, en lo que a posiciones se refiere: uno de los miembros del centro del campo dejó paso a Jesé Rodríguez. Así, el Real Madrid jugó con un mentiroso 4-4-2 (con el canario y Bale en bandas) que en realidad fue un 4-2-4 que partió al equipo, algo que ya pasó en el Vicente Calderón cuando los blancos perdieron 4-0.

El paso siguiente fue fortificar el centro del campo, con el fin de enmendar lo anterior. Esto provocó la eliminación de uno de los jugadores creativos de la medular. Inferioridad en el centro del campo y menos creación.

Mismos cambios, mismos resultados. El buen hacer de Ancelotti en la creación de esquemas choca con la modificación de estos cuando cambian las circunstancias. Eso ha pesado al equipo, que no ha tenido soluciones, 'planes B' y en muchas ocasiones ha quedado supeditado a acciones individuales (que no han llegado) o al recurso fácil de los centros al área, fácilmente defendibles.

Ancelotti tiene a su favor la baza de un banquillo con pocos argumentos (percepción que se ha ido descubriendo a lo largo de los meses), pero su utilización de los recursos ha sido lineal, carente de elementos de sorpresa. En definitiva, un guión con el mismo planteamiento, nudo y desenlace que se hace cada vez más vulnerable a ojos de los rivales.

Al margen de los partidos de Liga de este mes de marzo, hubo otro partido que se saldó con resultado adverso, el 3-4 ante el Schalke, en el que tampoco hubo reacción. De hecho, los alemanes hicieron dos goles tras las modificaciones de Ancelotti. En el tramo final del encuentro, los de Di Matteo encontraron una vía de escape en el centro del campo del Real Madrid. El técnico, en esta ocasión, no modificó el dibujo: fueron sustituciones de hombre por hombre. Tampoco consiguió reacción alguna.