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Momento para inversiones 'premium' en la Ciudad Condal



    Tras siete años de profunda crisis económica el mercado inmobiliario español ha sufrido un descuento del valor de sus activos de alrededor del 40 por ciento. Las propiedades prime (incluyendo inmuebles donde se ubican algunos de los más emblemáticos hoteles de lujo del país) se han visto muy afectadas y el número de operaciones realizadas durante este periodo se ha reducido drásticamente por diferentes motivos que han desaconsejado a los inversores realizar las operaciones: (i) la contracción de la economía productiva española; (ii) la crisis de la deuda soberana y el riesgo de una posible intervención; (iii) los niveles alarmantes de desempleo (por encima del 25 por ciento de la población activa); (iv) un nivel de deuda pública equivalente al 98 por ciento del PIB; (v) y los continuos escándalos políticos y económicos.

    Las reformas estructurales (impositivas, laborales, medidas contra la corrupción, de estímulo del empleo, amnistía fiscal, etc.) introducidas por el Gobierno español con la supervisión de los organismos europeos han cambiado radicalmente el panorama, tal como ha refrendado el Fondo Monetario Internacional en las perspectivas económicas mundiales publicadas el pasado 14 de abril, donde estiman para España un crecimiento del 2,5 por ciento del PIB para este año 2015.

    Una previsión que se une al cambio de tendencia reflejado ya en los indicadores del mercado inmobiliario en ciudades como Barcelona, donde los precios se han recuperado el 10 por ciento desde el punto más bajo alcanzado a mediados de 2013 en activos inmobiliarios muy singulares tanto por su estilo arquitectónico (joyas modernistas, versión catalana del Art Nouveau francés, neoclásicas, noucentistas, vanguardistas, etc.), como por su ubicación o también por su gran antigüedad.

    En un entorno de bajos tipos de interés la rentabilidad que proporciona el mercado inmobiliario barcelonés resulta muy atractiva en comparación con otros tipos de activos.

    Una situación que, unida al impacto favorable que tiene para los inversores internacionales fuera de la zona euro la depreciación del euro frente al dólar y la libra esterlina, ofrece un descuento de las viviendas prime entre el 50 por ciento y el 40 por ciento desde hace apenas unos años. Una oportunidad de inversión excelente a tener en cuenta.