Evasión

Documental 'Velintonia 3': un viaje a la casa de Aleixandre, refugio de poetas y faro de libertad en la España franquista

  • El largometraje, escrito y dirigido por Javier Vila, se estrena en el Festival de Málaga
  • Esa casa era el lugar donde se encontraban los grandes poetas de la Generación del 27
Vista de Velintonia, la que fue casa de Vicente Aleixandre. EFE/Fernando Alvarado/Archivo

Evasión

Velintonia, la emblemática casa de Madrid que fue hogar del poeta Vicente Aleixandre durante más de cincuenta años, se enfrenta actualmente a un futuro incierto. Abandonada y en estado de deterioro, este lugar, que durante gran parte del siglo XX sirvió de refugio y punto de encuentro para poetas y escritores, sigue siendo un símbolo del poder de la cultura en tiempos oscuros. A punto de celebrarse su estreno en el Festival de Málaga, el documental Velintonia 3, dirigido por Javier Vila, profundiza en la memoria de este espacio tan significativo para la literatura española.

La casa de Aleixandre, considerada un faro cultural durante los años más sombríos del franquismo, acogió a figuras clave de la Generación del 27 y se convirtió en un refugio para la poesía durante el exilio de muchos autores. Como recuerda Vila en una entrevista, las dificultades para acceder a la casa durante la producción del documental fueron significativas, incluso con una subasta que amenazaba con complicar la logística del rodaje. Sin embargo, la perseverancia del equipo consiguió abrir las puertas de Velintonia y preservar su historia para las generaciones futuras.

Hoy en día, la casa está catalogada como Bien de Interés Patrimonial (BIP), lo que garantiza su conservación, pero también abre la puerta a que se le dé un uso distinto, incluso no relacionado con la cultura. El futuro de Velintonia es incierto debido a las disputas entre los herederos de Aleixandre, quienes han rechazado varias ofertas de adquisición por parte de la administración pública. Sin embargo, Vila apunta a un posible cambio en la situación, ya que si se declara Bien de Interés Cultural (BIC), la casa debería recuperar su uso cultural original.

Para Vila, su documental tiene una misión clara: "Una reivindicación silenciosa" que busca recuperar la memoria de Aleixandre y la importancia de la casa en la historia literaria de España. A través de cartas y materiales inéditos, el documental ofrece una visión más íntima de Aleixandre y sus colegas, mostrando una faceta desconocida del poeta que habitó Velintonia, un espacio que también fue clave para la resistencia cultural durante la dictadura.

Javier Vila. EFE.

La resistencia en el franquismo

Durante el Franquismo, cuando muchos poetas de la generación de Aleixandre estaban exiliados o muertos, Velintonia se convirtió en un refugio para aquellos que luchaban por mantener viva la llama de la cultura. El poeta sevillano, uno de los pocos en España con influencia en el exilio, utilizaba su casa como un punto de encuentro para mantener el contacto con aquellos que ya no podían regresar. Era un símbolo de resistencia cultural, un refugio donde se mantenían vivos los valores de una España previa al franquismo.

Con la entrada de Aleixandre en la Real Academia Española en 1949, la casa se convirtió en un lugar aún más significativo, un destino obligado para muchos poetas jóvenes que aspiraban a ser parte del legado de la Generación del 27. Hoy, los testigos de esa época, muchos de los cuales volvieron a Velintonia para la grabación del documental, evocan una época en la que la poesía era resistencia, pero también esperanza.

El documental cuenta con los testimonios de destacados poetas y escritores como Vicente Molina Foix, Guillermo Carnero y Antonio Colinas, quienes comparten sus recuerdos y reflexiones sobre la figura de Aleixandre y el impacto de su casa. Además, se incluye la lectura de textos por actores como Antonio de la Torre y Ana Fernández, que aportan una dimensión emocional a la narración.

Con la película, Vila no solo quiere rememorar la figura de Aleixandre, sino también proyectar un futuro en el que Velintonia vuelva a ser un centro cultural vivo. Su sueño es que la casa se transforme nuevamente en un lugar de encuentro para poetas y artistas, y que el jardín vuelva a abrir sus puertas a la comunidad literaria. A través de esta propuesta, el director espera que su documental no solo celebre el pasado, sino que impulse una reflexión sobre la importancia de preservar la memoria y los espacios culturales de cara al futuro.