Energía

Siemens Gamesa no instalará molinos de Adwen

  • Francia acepta sustituir las máquinas del último proyecto en sus costas
Parque eólico de Wikinger (en Alemania), de Iberdrola, con aerogeneradores de Adwen.

Tomás Díaz

Francia acepta que Siemens Gamesa sustituya los aerogeneradores del futuro parque eólico marino de Saint Brieuc -promovido por Iberdrola- y la acción del fabricante subía ayer un 4% en bolsa en una jornada plana. ¿Por qué? Pues porque despeja incertidumbres: era el último proyecto de Adwen, la antigua filial con la gala Areva, cuya tecnología competía con la de Siemens.

Gamesa y Areva, el coloso nuclear público francés -hoy integrado en EDF-, crearon Adwen en marzo de 2015 con la intención de hacerse con el 20% del negocio eólico marino de la UE en 2020. Entre los proyectos que se adjudicó había tres en la costa gala, Dieppe/Le Tréport, Yeu/Noirmoutier, y Saint Brieuc, valorados en unos 7.500 millones de euros.

Pero apenas un año después del nacimiento arrancaron las negociaciones de fusión entre Siemens y Gamesa, y Adwen era un serio obstáculo: no solo tenía una tecnología de aeogeneradores competidora con la de la firma alemana, sino que había una cláusula contractual que obligaba a los socios a no realizar otras actividades en eólica marina, lo que condicionaba la integración.

Casi 600 millones de coste

Gamesa intentó vender sin éxito su participación en Adwen y al final tuvo que comprar la participación de Areva. Le costó 60 millones, a los que se le añadieron 240 millones de deuda, así como un préstamo de accionistas de 211 millones y unos pasivos de otros 80 millones aproximadamente. En conjunto, casi 600 millones.

La fusión, en cualquier caso, se había salvado, y en el subsiguiente proceso de integración empresarial era bastante claro que los aerogeneradores de Adwen iban a desaparecer. Comparativamente, Siemens contaba con una cuota del mercado eólico marino global del orden del 60 por ciento, frente a poco más del 5 por ciento de Adwen, y además ambas tecnologías convergían en vez de complementarse.

Pero para que las turbinas de la antigua subsidiaria -se fabrican en Bremerhaven, Alemania- pasaran a mejor vida y conseguir las sinergias correspondientes, Francia debía admitir su sustitución en los tres parques referidos. Y el último permiso, correspondiente al parque de Saint Brieuc, de 500 MW, acaba de recibirse; los otros dos llegaron el pasado mes de septiembre.

Siemens Gamesa mantiene los planes industriales de Adwen, como abrir dos fábricas en Francia y desarrollar una red de proveedores locales en el país, pero da carpetazo a su tecnología. Y el mercado celebra que acabe la incertidumbre.