Endesa alza su negocio con fuerza en la Península Ibérica

El principal negocio de Endesa es la generación, distribución y venta de electricidad. Pero no el único. También es un operador relevante en el sector del gas natural, además desarrollan soluciones innovadoras para personalizar sus servicios relacionados con la energía. Endesa trabaja con el objetivo de conseguir un nuevo modelo energético basado en las energías limpias para ofrecer un mejor servicio y cuidar del planeta. Con más de 9.000 empleados, presta servicio a más de 12 millones de clientes.

Fundamentalmente, la compañía desarrolla su negocio en el mercado de España y Portugal. En menor medida, comercializan electricidad y gas en otros mercados europeos -como Alemania, Bélgica, Francia y Holanda- así como otros productos y servicios de valor añadido (PSVA) relacionados con su negocio principal. Además de España y Portugal, la actividad de generación se realiza también en Marruecos. En dicho país operan a través de su participación en Energie Electrique de Tahaddart. Participan en centrales de producción eléctrica que funcionan a partir de diferentes fuentes de energía: hidroeléctrica, nuclear, térmica, eólica y solar. Así, contribuyen a la transición energética hacia una economía descarbonizada a través de las renovables, la digitalización y la economía circular.

La relación de Endesa con Portugal comienza en 1993, al tomar participación en la compañía portuguesa Tejo Energía. En 2002, junto con la empresa portuguesa Sonae, constituyen una empresa mixta para comercializar electricidad en Portugal. Muestra de su avance en la Península Ibérica es la escalada de Endesa en los últimos años hasta conseguir 780.000 clientes en Portugal, donde se ha consolidado como segundo operador del mercado energético residencial. Además, en el país vecino tiene el 22% de la cuota de mercado industrial y empresarial (B2B) y es el mayor proveedor energético de las administraciones públicas lusas.