Energía

El primer gran buque con metanol verde empezará a navegar en febrero

    Ursula von der Leyen durante la botadura del 'Laura Maersk'

    Concha Raso

    El próximo 9 de febrero entrará en servicio el primer gran buque portacontenedores oceánico que funciona con metanol verde. Propiedad de la empresa danesa Maersk y construido por Hyundai Heavy Industries en Corea del Sur, tiene una capacidad nominal de 16.000 contenedores TEU (unidad equivalente a veinte pies) y está equipado con un motor de combustible dual que le permite operar con metanol, biodiésel y combustible de búnker (fueloil), con el que cubrirá la ruta comercial AE7, una de las más grandes del mundo, que conecta Asia y Europa a través del Canal de Suez.

    La empresa logística ha asegurado suficiente metanol verde para cubrir el viaje inaugural del buque, cuyo primer destino es el puerto chino de Ningbo, y continúa trabajando en soluciones de abastecimiento para 2024 y 2025 para su flota de buques habilitados para el uso de metanol.

    El buque, que será bautizado en el puerto de Copenhague a finales de enero, supone, tal y como explican desde la compañía danesa, "todo un hito en el camino hacia nuestro objetivo de alcanzar las cero emisiones netas de gases de efecto invernadero en todas nuestras áreas de negocio en 2040, además de una ventana de oportunidad para nuestros clientes a la hora de descarbonizar sus cadenas de suministro. Nuestra intención es transportar un mínimo del 25% de la carga oceánica utilizando combustibles ecológicos para 2030".

    Los siguientes dos buques gemelos comenzarán a navegar en el primer semestre de 2024 y la compañía espera recibir cuatro buques iguales más en el segundo semestre. Toda esta flota forma parte de los 24 buques portacontenedores que Maersk tiene encargados para entrega entre 2024 y 2027. Desde 2021, la compañía sólo encarga buques nuevos capaces de operar con combustibles ecológicos. Doce de ellos tienen una capacidad de 16.000 TEU, otros seis tienen una capacidad de 17.000 TEU y los seis restantes de 9.000 TEU. Todos los barcos estarán equipados con motores de combustible dual capaces de operar con metanol verde, lo que, según indican desde la compañía, "supondrá un ahorro de 2,75 millones de toneladas de emisiones de CO2 al año cuando todos ellos estén operativos".

    Aunque el buque que se botará en febrero será el primero de gran tamaño en utilizar este tipo de combustible ecológico, en realidad, en el momento de su despliegue, se convertirá en el segundo portacontenedores del mundo en servicio equipado con metanol verde. El pasado mes de septiembre, la compañía danesa puso en servicio el Laura Maersk, un portacontenedores de 2.100 TEU -alrededor del 10% de lo que suelen transportar los portacontenedores más grandes del mundo-, en una ceremonia donde la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, fue la madrina. La empresa holandesa OCI Global suministró el metanol verde para el viaje inaugural, aunque el combustible lo recibirá de Equinor en el puerto de Róterdam (Países Bajos) durante sus primeros meses de operación hasta que la empresa European Energy comience a producir e-metanol en su nueva planta, ubicada al sur de Dinamarca, cuya entrada en funcionamiento está prevista en la segunda mitad de 2024.

    Hacen falta más infraestructuras

    La implementación exitosa de este tipo de iniciativas dependerá, en gran medida, del establecimiento de una infraestructura portuaria para el abastecimiento de metanol en todo el mundo. Para 2030, Maersk necesitará unos cinco millones de toneladas de combustibles verdes para sus barcos; sin embargo, la producción mundial actual de metanol verde es inferior a 100.000 toneladas, por lo que la aceleración de la producción y la ampliación son de gran importancia.

    A este respecto, Maersk anunciaba a finales de noviembre la firma de un acuerdo histórico a largo plazo de suministro de metanol verde con la compañía china Goldwind, la cual suministrará 500.000 toneladas anuales de este combustible ecológico a partir de 2026. Los volúmenes acordados comprenderán una mezcla de bioetanol verde y e-metanol, este último producido mediante energía eólica en una planta que aún está por construirse en el noreste de China. Asimismo, la compañía danesa ha firmado, también en 2023, dos Memorandos de Entendimiento (MOU) con Shanghai International Port Group (SIPG), así como con Mitsubishi Gas Chemical (MGC) y la ciudad japonesa de Yokohama, para desarrollar las instalaciones portuarias necesarias para el abastecimiento de combustible de metanol ecológico en los puertos de Shanghái y Yokohama.

    Cada año, 100.000 buques propulsados por 300 millones de toneladas de combustibles fósiles mueven 11.000 millones de toneladas de mercancías en todo el mundo. Esto hace que el transporte marítimo sea responsable de unos 1.076 millones de toneladas de emisiones de CO2 al año, que representan alrededor del 3% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero.

    En aras de acelerar la descarbonización del transporte marítimo mundial, los consejeros delegados de las principales líneas navieras mundiales, entre las que se encuentra Maersk, aprovecharon la celebración de la COP28 para emitir una declaración conjunta en la que piden una fecha de finalización para las nuevas construcciones propulsadas exclusivamente por combustibles fósiles e instan a la Organización Marítima Internacional (OMI) a crear las condiciones regulatorias necesarias para acelerar la transición a combustibles verdes.

    En el ámbito marítimo, 2023 ha sido un año marcado por proyectos y anuncios de gran calado. El avance más importante ha sido la adopción del objetivo de cero emisiones netas y la estrategia revisada de GEI de la OMI. En julio de 2023, este organismo adoptó una estrategia revisada de gases de efecto invernadero con el objetivo de lograr emisiones netas cero en 2050.

    Los Estados miembros de la OMI se han comprometido a reducir la intensidad de carbono del transporte marítimo internacional en, al menos, un 40% para 2030 en comparación con 2008, y a acelerar la adopción de tecnologías, combustibles y/o fuentes de energía con emisiones nulas o casi nulas de GEI para representar, como mínimo, el 5%, esforzándose por alcanzar el 10% de la energía utilizada por el transporte marítimo internacional para 2030. Se trata de un gran paso y una estrategia considerablemente más ambiciosa en comparación con el objetivo anterior de reducir a la mitad las emisiones del transporte marítimo para 2050.

    Cepsa y Maersk construirán una planta de metanol en Huelva

    Como accionista de C2X, empresa creada en 2023 para construir y operar activos para producir metanol verde a gran escala, Maersk ha llegado a un acuerdo con Cepsa para desarrollar en el puerto de Huelva una de las cinco mayores plantas de metanol verde de Europa para ayudar a industrias como la marítima, la aviación y la química a alejarse de soluciones energéticas basadas en productos fósiles. Con una inversión de hasta 1.000 millones de euros y la creación de 2.500 empleos directos e indirectos, la instalación, que empezará a operar en 2028, tendrá capacidad para producir 300.000 toneladas al año, evitando la emisión de hasta un millón de toneladas de CO2.

    A través de esta iniciativa, Cepsa y C2X refuerzan su apuesta por Andalucía como localización estratégica en sus planes para avanzar en la transición energética. Esta región tiene las mejores condiciones para ser una de las más competitivas y eficientes del mundo en la producción de hidrógeno y metanol verdes y cuenta con una infraestructura portuaria de primer nivel conectada con los principales puertos y rutas de exportación de Europa y del mundo. La nueva planta posicionará al puerto de Huelva como referente mundial en el suministro de nuevos combustibles sostenibles para el transporte marítimo.