Preco venderá a Disa biolíquidos de su nueva planta en Portugal
- La compañía construye un centro que entregará 20.000 toneladas durante 10 años a Prio
Rubén Esteller
Preco firmó ayer un importante acuerdo con la empresa portuguesa Prio, propiedad de la petrolera española Disa, para suministrarles 20.000 toneladas de biolíquido anuales durante los próximos diez años. Adicionalmente, la compañía lusa se reserva una opción de compra para aumentar el acuerdo.
Con esta operación, realizada a través de la filial portuguesa de Preco, la empresa española de economía circular, asegura la rentabilidad de la planta de transformación de residuo plástico en biolíquido que está construyendo en el norte de Portugal.
La operación, según indicaron fuentes de la compañía, supone vender dos tercios de su producción total en exclusiva a la filial del grupo de Demetrio Carceller pudiendo llegar al cien por cien de la materia prima producida con tecnología y maquinaria española.
Para Juan Baena, presidente de Preco, "es la primera vez que una empresa española entra en este sector en el país con un contrato de suministro que asegura totalmente la viabilidad y rentabilidad de nuestra fábrica en Aveiro".
Prio, que lleva tiempo haciendo pruebas con el biolíquido producido en las instalaciones de Preco en Toledo, es la primera productora de biocarburantes de Portugal. Cuenta con una red de 250 gasolineras a lo largo del país y una planta de biocarburante en Aveiro, además de distribuir sus productos a otras compañías.
La planta de Preco, primera fuera de España, supone una inversión de 50 millones de euros con una creación de 70 puestos de trabajo directos y 200 indirectos.
Esta instalación funcionará con la tecnología Neoliquid desarrollada íntegramente en España. Las instalaciones situadas en el Concelho de Nelas, cerca de Aveiro, dispondrán de vía férrea para enlazar directamente con el corredor que une los puertos de Sines, Lisboa, Aveiro y Oporto, el corazón industrial de Portugal.
Para el presidente de Preco, la conexión ferroviaria es especialmente importante porque "nos permitirá abastecer por barco a las empresas petroquímicas del norte de Europa con las que ya estamos en negociaciones de suministro".
El biolíquido muestra propiedades similares a determinados combustibles fósiles. Es conseguido mediante tecnología extractiva, siendo utilizado en diversas aplicaciones energéticas. Del mismo modo, el biolíquido extraído es también destinado a la elaboración de múltiples compuestos químicos especialmente empleados en el sector químico y farmacéutico.
Además, el biocarburante obtenido puede ser empleado en el transporte, evitando el consumo de carburantes de origen fósil.