Energía

Galán espera que EEUU apruebe en marzo el megaproyecto eólico marino de Iberdrola en Massachusetts

  • Este lunes participaráen la Cumbre para la Acción Climática
  • Las emisiones de Iberdrola son inferiores en un 40% a la media del sector europeo
  • Inversión anual de 10.000 millones en los próximos años para llevar emisiones a cero en 2050

José Luis de Haro
Nueva York,

"El tiempo se acaba". Así justificó el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, su presencia en Nueva York donde el lunes interviene en la Cumbre para la Acción Climática de Naciones Unidas. "Hay que moverse rápido también porque este es un problema medioambiental pero también de la salud", alertó.

En un encuentro mantenido con la prensa española, Galán trató una variedad de asuntos, entre ellos adelantó que aunque el megaproyecto de eólica marina de 800 megavatios (MW) de Vineyard Wind, en Massachusetts, "se va a retrasar meses" algo que "costará dinero" espera que el Departamento de Interior de EEUU "de su aprobación el próximo mes de marzo".

Este proyecto, el primero en su tipo de la empresa española Iberdrola en la nación norteamericana, fue bloqueado temporalmente por la administración Trump, que decidió hacer un nuevo informe antes de conceder los permisos medioambientales.

No obstante, Galán aseguró que la compañía tendrá listo dicho estudio antes de finales de año "por lo que no hay ninguna razón" para que el Departamento de Interior no conceda su aprobación definitiva. Esto es importante dado que el retraso podría hacer perder los créditos fiscales asociados y que pueden llegar al 20% de una inversión de 2.500 millones de euros.

Más allá de estos contratiempos, el presidente de Iberdrola centró toda su atención en los esfuerzos y los compromisos de la compañía con un escenario climático alineado con un aumento máximo de la temperatura de 1,5 grados centígrados y con un marco adecuado de condiciones laborales y de transición justa en el proceso de descarbonización.

Galán explicó que la compañía que capitanea ya comenzó a entender hace casi de 20 años que el cambio climático era un desafío real para la humanidad que requería una actuación urgente. Por ello que abanderó esta transición mucho antes que otras empresas.

La compañía lleva contribuyendo desde entonces a conducir la transición energética hacia un futuro sostenible, con una inversión acumulada cercana a los 100.000 millones de euros, que le ha llevado a que más de dos tercios de su capacidad instalada sea hoy libre de emisiones.

Un proceso que no ha sido fácil. En Reino Unido, por ejemplo, cerrar las plantas de carbón costo a Iberdrola 500 millones de euros, no obstante Galán consideró que si se explica el proceso, "los accionistas entienden las cosas".

A día de hoy, las emisiones específicas de Iberdrola son inferiores en un 40% a la media del sector eléctrico europeo. En estos momentos, dijo Galán, "emitimos 80 gramos por megavatios hora (MWh) en Europa, que es un cuarto de lo que emiten los europeos, pero para el año 2030 eso será la mitad y para 2050 será cero".

Para ello, la compañía está tomando medidas, como la inversión anual de 10.000 millones en los próximos años y más que duplicar su parque de renovables. "Estamos subiendo nuestro ritmo de inversión", especificó Galán, quien señaló como este año se están destinando del orden de 8.000 millones de euros.

Iberdrola prevé reforzar la inversión en generación de energía limpia en España con la instalación de 3.000 nuevos megavatios (MW) hasta 2022. Hasta 2030, las previsiones de la compañía apuntan a la instalación de 10.000 nuevos megavatios (MW). El plan permitirá la creación de empleo para 20.000 personas.

La apuesta de Iberdrola pasa por liderar la transición hacia una economía totalmente descarbonizada, impulsando las energías renovables y acelerando inversiones en España, país al que ha previsto destinar 8.000 millones de euros durante el período 2018-2022.

El presidente de Iberdrola participará hoy lunes en la Cumbre para la Acción Climática de Naciones Unidas donde hablará sobre el argumento no solo económico y comercial sino también de salud para desfasar el carbón a favor de energía renovables. Sobre este tema también hablarán la presidenta de Eslovaquia, Zuzana C?aputova?, su homólogo coreano, Moon Jae-in, la directora del Clean Air Fund, Jane Burston, y el consejero delegado de Orsted, Henrik Poulsen.

Galán, quien se definió optimista por naturaleza, consideró que este tipo de objetivos y metas no invocan cambios "de cero a cien" pero consideró que con iniciativas como la respaldada por el secretario general de la ONU, António Guterres, "es un paso más en la buena dirección". "Me gustaría que fuera mucho más pero creo que esto suma y ayuda, no resta", aclaró.