Nazca vuelve con fuerza a la franquicia: compra Santagloria y Volapié

El gestor de fondos de capital riesgo adquiere a la catalana Europastry sus enseñas Santagloria, El Molí Vell y L'Obrador, y también toma el control de la andaluza Taberna del Volapié. Tras desinvertir en Rodilla (2005) y Lizarrán (2007), Nazca apuesta de nuevo por la franquicia tras el final de la crisis y avanza que negocia más compras.

La compañía especializada en invertir en pymes españolas no cotizadas ha creado Foodbox para agrupar su actividad en el sector de restauración. Esta nueva compañía ha incorporado a 16 profesionales de este sector (procedentes de enseñas como 100 Montaditos, La Sureña, TGB y Burger King). Entre ellos Carlos Pérez (presidente), Augusto Méndez de Lugo (director general) y Raimundo Jiménez (director financiero).

Este último es promotor del proyecto y socio de Nazca en la plataforma creada para la adquisición de enseñas, que se denomina FoodBox y que tiene como objetivo convertirse en un grupo multimarca de restauración líder en España con hasta 350 establecimientos en los próximos cinco años. Las cuatro enseñas compradas suman 90 tiendas, facturarán este año 35 millones y obtendrán un ebitda (beneficio antes de intereses, impuestos y amortizaciones) de 3 millones. El crecimiento hasta cuadruplicar la red en el próximo lustro se prevé orgánico, según ha explicado Nazca en un comunicado. A él se añadirá el procedente de las nuevas adquisiciones a realizar.

En el caso de las tres enseñas de Europastry, el grupo catalán especializado en masa congelada para productos de panadería se ha desprendido de la actividad con la que originalmente nació hace 30 años (panaderías), que había visto caer su cifra de negocio a menos de la mitad -de 40 a 15 millones- debido a la crisis en los últimos ejercicios. Las tres enseñas traspasadas suman 50 tiendas con 270 empleados.

En cuanto a Taberna del Volapié, modelo de gastro-taberna creada en 2008 por los empresarios jerezanos Ángel María Gutiérrez y su sobrino Javier Gutiérrez, cuenta con 40 establecimientos, fundamentalmente en Andalucía, donde abrió el primero en Málaga. La compra por Foodbox supone que queda sin efecto el acuerdo firmado entre la firma y Heineken en 2014 para que la cervecera impulsara el crecimiento de la cadena durante los tres próximos años. Heineken seguirá siendo proveedor de cerveza (Cruzcampo) de la cadena.