Empresas y finanzas

Echenique extiende su mandato en el Santander ante la tardanza de Orcel

  • El banco superó en 2018 su objetivo en vinculación de clientes
Rodrigo Echenique, vicepresidente del grupo Santander. <i>Foto: Archivo</i>

Eva Díaz

La negociación del nuevo consejero delegado del Santander, Andrea Orcel, para desvincularse de la entidad suiza UBS mantiene congelada la fecha de aterrizaje del ejecutivo en el grupo cántabro. Inicialmente, estaba previsto que Orcel se incorporara a inicio de este año al Santander, pero las conversaciones para dejar su cargo como miembro del comité ejecutivo de la entidad helvética apuntan a que el financiero podría alargar su llegada hasta finales de marzo o principios de abril.

Su ausencia ha repercutido directamente en los planes de Rodrigo Echenique, vicepresidente del grupo Santander, presidente de Santander España y presidente del Popular. La entidad que lidera Ana Botín anunció el pasado verano que Echenique dejaría sus funciones ejecutivas en el banco el 31 de diciembre de 2018. No obstante, el retraso de Orcel ha obligado al aún vicepresidente del grupo a extender sus funciones por tiempo indefinido. Echenique seguirá en la cúpula del banco un breve periodo de tiempo más, aunque su salida podría producirse semanas antes del aterrizaje definitivo del nuevo consejero delegado, según apuntan fuentes del mercado a este diario.

No obstante, la permanencia del vicepresidente ejecutivo del grupo aligera la labor de José Antonio Álvarez, quién aún ejerce como consejero delegado del Santander hasta la entrada de Andrea Orcel, pero que fue nombrado por Ana Botín nuevo vicepresidente del grupo en sustitución de Echenique. Álvarez evita así la duplicidad de cargos hasta que se materialicen los cambios de forma definitiva.

El Santander retrasó en otoño la presentación de su Plan Estratégico a la espera de conocer la evolución de las elecciones generales de Brasil y el Brexit.

Nuevos objetivos

La llegada de Orcel al grupo coincidirá, previsiblemente, con el desenlace final del Brexit, es decir, con la desconexión del Reino Unido del resto de la Unión Europea, por lo que el nuevo plan podría afrontar el próximo trienio con un conocimiento más certero de las consecuencias de la espantada británica.

La presidenta del Santander, Ana Botín, destacó el pasado 14 de diciembre en una reunión con más de 300 directivos de la entidad en España que el grupo ha cumplido con los objetivos que se marcó en los últimos años, logrando crecer, vincular más clientes, fortalecer el capital y definir la estrategia y la nueva cultura del banco. A falta de conocer los resultados de cierre de 2018, cuya presentación tendrá lugar el 30 de enero, el banco ha superado el objetivo marcado para este año en vinculación de clientes. La entidad ha logrado 19,1 millones de clientes vinculados frente a los 18,6 millones propuestos. En lo que respecta a los clientes digitales, el banco contaba con 28,3 millones a cierre del tercer trimestre del año, cifra cercana a los 30 millones que fija el Plan Estratégico. Botín abogó en la reunión con los directivos por trasladar al mundo digital la estrategia de vinculación de clientes.

Asimismo, la entidad también cumplió en septiembre con la meta marcada para la ratio de rentabilidad y eficiencia.