Empresas y finanzas

Las medidas de Sánchez marcan la agenda de Garamendi en CEOE

  • Antonio Garamendi estrena presidencia este miércoles
Antonio Garamendi, futuro presidente de CEOE. Imagen: EFE

Juan Ferrari

Antonio Garamendi estrenará el miércoles la presidencia de la CEOE con el reto de hacer frente a las medidas anunciadas por el Gobierno en materia fiscal, laboral y medioambiental, que suponen un fuerte aumento de los costes para las empresas. 

Según cálculos de elEconomista, entre las subidas de las cotizaciones máximas y las mínimas y la reforma fiscal, las empresas tendrán un sobrecoste de 5.724 millones anuales. Pero a medio y largo plazo, el empresario vasco también deberá volcar sus esfuerzos en la gobernanza de la organización de empresarios.

El Ejecutivo de Pedro Sánchez ha colocado a las compañías en el centro de la diana de los ingresos nuevos que pretende recaudar, pues de sus balances saldrá el 70 por ciento de los 8.280 millones que han ido anunciando en estos meses, aunque ninguna medida recaudatoria haya sido aprobada todavía. Este es el objetivo más urgente que marca el arranque de la singladura de Garamendi al frente de la patronal.

En su haber, Garamendi no es nuevo y como presidente de Cepyme y vicepresidente de CEOE ha estado en el día a día de las grandes batallas, tanto internas como externas. De hecho, ha formado tándem con su predecesor y ha rubricado conjuntamente todos los grandes acuerdos y ha participado de forma directa en las negociaciones con sindicatos y con el Gobierno, el anterior del PP y el actual del PSOE.

El sucesor de Juan Rosell ha ido aportando pistas de qué opina de algunos de los grandes problemas que ya tiene en su agenda. Entre la pistas que ha desgranado, Garamendi ha tildado de "barbaridad" gravar a las empresas con un 5 por ciento por sus beneficios en el extranjero y llegó a decir que si sale adelante habrá compañías y bancos que se deslocalicen. Más discreto se ha mantenido en las subidas de otros impuestos anunciadas por el Gobierno socialista: elevar la tasa efectiva de las grandes empresas -el 15 por ciento en términos generales y el 18 por ciento para energéticas y bancos-, aunque con una rebaja para las pymes del 25 por ciento al 23 por ciento, y la creación de la tasa Google y el de Transacciones Financieras. Pero ha explicitado su rechazo a la pretensión lanzada por la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, de establecer por ley cuotas femeninas en los consejos de administración de las empresas.

Respecto a las subidas de las cotizaciones sociales, en las mínimas, tras elevar el SMI a 900 euros, la CEOE se ha mostrado contraria por las formas, más que por el fondo. De hecho, Rosell y Garamendi se esforzaron en convencer a sus ejecutivas para conseguir que se aprobase el acuerdo firmado en diciembre con sindicatos y el gobierno del PP de elevarlo a 850 euros en 2020. Más activo ha estado con el destope de las cotizaciones máximas un 12 por ciento, que según la CEOE podría suponer unos 1.760 millones de euros.

Programa interno

De cara a la organización, Garamendi anunció el mismo día que desveló su intención de postularse como presidente, que su objetivo era poner en valor a los empresarios y la empresa.

Aunque el nuevo patrón de patronos no ha presentado un documento programático como señalan en una de las organizaciones que le han apoyado explícitamente, fuentes del entorno de Antonio Garamendi señalan que sus puntos de trabajo se centran en la unidad empresarial, reforzar la independencia de la organización; fortalecer la representatividad, participación y transparencia; así como un compromiso y colaboración en el desarrollo económico y social de España desde la lealtad institucional. Y defender como modelo la economía de mercado, la libertad de empresa y la unidad de mercado y la labor que realizan los empresarios como generadores de riqueza y empleo.