Empresas y finanzas

Visa: "En España hay grandes bolsas de efectivo que crean oscuridad y fraude"

    Carmen Alonso, directora general para España de Visa Europe. <i>Daniel G Mata.</I>

    Rubén Esteller, Fernando Tadeo

    Visa trabaja en proyectos para adaptarse a los nuevos tiempos con herramientas para los medios de pago electrónicos. Su directora general en España, Carmen Alonso, se muestra optimista sobre el desarrollo de la compañía y quita hierro a las amenazas de los gigantes tecnológicos y la tarjeta sectorial que la banca española pretende sacar al mercado.

    Además, considera que el Gobierno y todos los agentes deben aumentar la presión para terminar con las bolsas de efectivo, que son, a su juicio, fuente de "gran opacidad" y "fraude".

    ¿La compañía ha solucionado completamente los problemas técnicos que hubo el 1 de junio?

    Sí. Por una horas el sistema tuvo cuello de botella y en algunos casos las órdenes no se ejecutaron correctamente. Se arregló ese mismo día. En España afectó poco. Fue un problema de hardware que está detectado, pero se están haciendo los análisis correspondientes. El proceso se ha hecho con total transparencia y hemos pedido disculpas porque estas cosas no deben ocurrir. Informamos a los reguladores en Europa y todo el mundo estuvo informado en todo momento.

    ¿En qué proyectos está trabajando ahora la compañía para adaptarse al cambio tecnológico y social?

    Por un lado, estamos enfocados en habilitar todo el sistema que llamamos pagos por el móvil. Y por otro lado, en desarrollar como estrategia de país la eliminación del efectivo. Donde vemos bolsas de efectivo y sectores donde el hábito hace el uso del metálico allí nos movemos. Un ejemplo claro es el transporte. Hemos visto en Londres que expandir la aceptación y la frecuencia de los pagos electrónicos reduce el fraude. Es importante que se entienda lo que un medio de pago electrónico genera a la sociedad: transparencia y ahorro de costes porque el efectivo es costoso y tiene mayor capacidad de fraude.

    El Gobierno va a obligar a todos los comercios a disponer de sistemas de pagos electrónicos. ¿El siguiente paso debería ser la eliminación de las monedas de céntimos?

    Lo que es más cómodo y beneficioso para el cliente al final, regulando o no regulando, va a salir adelante. No hemos estudiado el caso de las monedas, pero en particular diría que el tema de los céntimos es engorroso y al final se acaba redondeando precios y rechazando las vueltas porque supone un poco de lata en la cartera. Quizás acabe llegando. En el lado de la aceptación de los pagos electrónicos, el Gobierno ya ha dado un paso adelante con la obligación de pagos electrónicos a los comercios, pero todavía queda la eliminación del pago en efectivo, porque hay grandes bolsas de efectivo que no generan más que oscuridad y fraude.

    ¿La compañía está reclamando al Gobierno que se reduzca el límite de 1.500 euros en los pagos en efectivo?

    Hemos mandado varias medidas que se han adoptado en otros países. Creo recordar que sí hemos reclamado la revisión de esta limitación.

    ¿Se han planteado crear sistemas o tarjetas concretos para 'bitcoins' o 'criptomonedas'?

    Nosotros trabajamos con unas 250 monedas de curso legal y se puede comprar todo si se liquida con ellas, también bitcoins. Ahora hay mucha controversia y opiniones para todos los gustos. Visa tiene una posición de explorar, de no descartar nada, pero no ha tomado una decisión.

    ¿Cómo se está acercando la compañía al mundo de las 'fintech'?

    Lo que hemos hecho es fijarnos mucho en lo que hacen y nos ha supuesto querer ser más rápidos. Hemos aprobado una inversión de 100 millones para Europa con el fin de facilitar a las fintech que trabajen en los medios de pago.

    Todo el sector financiero ve a Apple, Amazon o Facebook como una verdadera amenaza. ¿Lo son también para Visa?

    Ellos tienen su hoja de ruta, pero Visa existe desde hace 60 años y ha sabido afrontar difíciles momentos. Sabremos adaptarnos y colaborar. Es sorprendente la cantidad de adaptaciones que hemos hecho.

    ¿Cómo se están preparando para la llegada de la tarjeta propia sectorial que están creando los bancos en España?

    Estamos trabajando en nuestros proyectos, ésta es nuestra fortaleza y nos adaptaremos. Pero las competencias locales ya murieron hace años. ¿Qué van a aportar que no esté encima de la mesa? Yo tengo preguntas como ésta.

    El fraude y los robos no han subido con las tarjetas 'contactless'. ¿Sería deseable aumentar el importe de los 20 euros para su uso?

    El uso en España de este tipo de tarjetas es más alto que en Europa. Casi el 50% de todas las transacciones con tarjeta es con contactless y, sin embargo, no hemos visto un repunte relevante en el fraude. Lo que sucede es que las entidades tienen sus controles y Visa también tiene su normativa para que el cliente asuma responsabilidad cero. Sería partidaria de aumentar el límite de 20 euros, porque el importe medio es de 35 o 40 euros por operación.

    ¿No habría que hacer las tarjetas con otros materiales menos contaminantes que el plástico?

    Esto se habla desde hace muchos años, pero las tarjetas ahora se están insertando en los móviles. Al final la emisión del plástico ya no será un tema de discusión. Algunos bancos españoles se han planteado que sea el cliente quién decida si su tarjeta se tiene que emitir en plástico o no, aunque su eliminación generalizada quizás es prematuro.