No te dejes engañar por el marketing de las cremas solares: las más caras no son las de mejor calidad
- La OCU ha analizado 22 de los solares más vendidos en el mercado
- Algunas cremas varían mucho su calidad aun siendo del mismo fabricante
Patricia C. Serrano
En muchas ocasiones, lo barato puede salir caro. Y sin embargo, esta frase hecha no debería ser tomada como verdad universal. Así viene demostrándose cada año en el ámbito de la industria cosmética, que lanza productos cada vez más innovadores y de precios altos, buscando conquistar a los consumidores a golpe de seducción sensorial mientras que la calidad queda enmascarada. Las cremas solares no escapan a esta tendencia.
Al inicio de cada verano, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) realiza un análisis de los artículos de protección solar más vendidos del mercado, para ofrecer una mejor información acerca de qué es lo que se está comprando más allá de un olor apetecible o una textura agradable. En estos estudios, que valoran el producto tanto en laboratorios como en pruebas con usuarios, las sorpresas siempre están a la orden del día. Así, nos encontramos con marcas muy populares y con buena imagen entre los consumidores que son etiquetadas como de mala calidad por los laboratorios, y otras que nos sorprenden con solares baratos y de altísima calidad. Estos son los datos más destacables del análisis de los 22 solares más populares.
El mejor resultado en puntuación en el análisis del laboratorio lo ha obtenido el aerosol de Aptonia, marca solar de Decathlon, que es de las más económicas
Buena calidad y mejor precio
Las cremas protectoras de factor 30 de Decathlon (línea Aptonia), Babaria Sun Milk Spray, Ecran Sun Lemmonoil Spray y la clásica leche corporal Nivea Sun Protege&Broncea demuestran con una altísima valoración en su composición y protección con respecto a las radiaciones que el precio no es sinónimo de un mejor producto. Ninguno de estos solares supera los 6 euros por 100 mililitros, y la OCU elige como mejor opción calidad-precio el espray de Ecran, cucyo envase de 300 ml ronda los 11,49 euros.
El mejor resultado en puntuación de laboratorio, donde se verifica el factor real con respecto al anunciado, el nivel de protección con respecto a las radiaciones UVA y se penalizan las sustancias dudosas o alérgenos en su composición, lo ha obtenido el aerosol de Aptonia, marca solar de Decathlon, cuyo frasco de 150 ml no llega a los 9 euros. La leche de Nivea Sun y el espray de Babaria tienen un coste parecido (9,90 y 8,95 euros sus respectivos envases de 200 ml) y son otras buenas opciones que combinan a la perfección la calidad con el valor.
El caso de Hawaiian Tropic demuestra que los usuarios se dejan llevar por factores que en nada se relacionan con la calidad del producto
Los productos solares de SPF 30 de Biotherm (Spray Solaire Lacté), La Roche Posay Anthelios (tanto espray ultraligero como en crema) y la leche Apivita Suncare se encuentran asimismo en la parte alta de calidad de la tabla, pero con precios que superan los 20 euros en sus botes de 200 mililitros. El aerosol y la leche de Garnier Delial Ambre Solaire obtiene una alta puntuación en el laboratorio y el precio es inferior, de 17,15 y 13,95 euros, respectivamente. El aerosol transparente de Eucerin, también muy bien puntuado, tiene un coste de 18,35 euros por los 200 ml de producto.
Olor y textura esconden una mala calidad
Un fenómeno muy curioso que deviene de desgranar los tres criterios de puntuación en cada solar (laboratorio, experiencia de usuarios y etiquetado) alude a cómo los consumidores pueden sentirse muy atraídos por una crema debido a su experiencia en uso -fácil de extender, rápida absorción, buen olor y agradable textura, por ejemplo-, pero esto no se corresponde con la auténtica calidad de la misma. Esto demuestra que la industria cosmética puede burlar fácilmente al consumidor invirtiendo en texturas y fragancias destinadas a seducirle en un plano sensorial y no racional. En general, los usuarios suelen valorar mejor los formatos en pulverizador, con textura ligera que se absorba rápido.
Un caso muy llamativo del análisis es el del aerosol de Hawaiian Tropic Satin Protection, con una valoración de cero puntos en el laboratorio frente a una experiencia en usuarios que lo puntúan con un 85 sobre 100. Otra crema de la misma marca, la Hawaiian Tropic Silk Hydration, también está clasificada en el grupo de mala calidad, con 10 puntos sobre 100 en el análisis químico y, sin embargo, 79 sobre 100 en la valoración de los consumidores. La tabla de solares de mala calidad la completan la popular crema de Piz Buin (13,95 euros) y Biosolis Lait Solaire con uno de los precios más elevados, 16,77 euros los 100 mililitros.
Otra de las conclusiones que trasluce del estudio es que una misma marca no es sinónimo de calidad, ya que puede fabricar solares de distinta categoría. El mejor ejemplo queda reflejado con Ecran: de los dos artículos analizados, uno es la recomendación de la OCU entre los 22 analizados, y otro, en textura de leche protectora, no pasa de la calidad media.