Empresas y finanzas

Sonae instala su sede central en un edificio de Hispania

  • Sus oficinas se ocupan al 95%, tras arrendar el inmueble de 6.760 m2

Alba Brualla

Hispania será el nuevo casero en Madrid del gigante luso Sonae, que reunifica sus oficinas en la capital en un inmueble de la socimi. Concretamente, el holding ha firmado un contrato de alquiler para ocupar íntegramente el edificio Iconic, situado en el 21 de la calle Ramírez Arellano.

Con este movimiento, el grupo que preside Paulo de Azevedo, refuerza su apuesta por España, que es actualmente su mercado exterior más importante, con una nueva sede central en nuestro país. Por su parte, la socimi logra llenar el edificio tras la inminente salida del Grupo Publicis, actual inquilino del mismo.

Esta operación, que ha sido asesorada por las consultoras Cushman & Wakefield y JLL, supone el arrendamiento de los 6.759 metros cuadrados del inmueble y sus 110 plazas de garaje. El activo, diseñado por Rafael de La Hoz, se encuentra situado en el cruce entre la autovía A-2 y la M-30, en una de las zonas de oficinas más consolidadas de la capital, donde se encuentran otras empresas como AXA, Iberia o BNP Paribas, y muy cercano al edificio de Murano, también propiedad de Hispania.

Estos dos inmuebles forman parte de una cartera de oficinas compuesta por 24 inmuebles que cuentan con una ocupación económica cercana al 95% tras la firma de este último contrato. Además, la socimi cuenta con un solar en construcción, en el que desarrollará dos edificios adicionales, haciendo un total de superficie bruta alquilable de 182.325 metros cuadrados situados en zonas de negocio consolidadas de Madrid y Barcelona.

Tras varios intentos fallidos

La socimi, que nació con una fecha establecida de liquidación, ha intentado vender en dos ocasiones este portfolio. En la primera ronda alcanzó un principio de acuerdo con la aseguradora Swiss Life, que se frustró por la incertidumbre política que generó la crisis secesionista de Cataluña.

En la segunda ocasión fue la OPA de Blackstone la que irrumpió de lleno en la venta de esta cartera, valorada en más de 550 millones de euros, y que estaba ya casi en manos del fondo británico Tristan Capital Partners.