Empresas y finanzas

La banca controlará Metrovacesa: seis acreedores tendrán el 65,5% de su capital



    Los Sanahuja se despiden de la mayoría de Metrovacesa. Santander, BBVA, Banco Popular, Caja Madrid y Sabadell serán los nuevos dueños de la sociedad, al quedarse con el 65,5% del capital con el canje de deuda por acciones que pactaron ayer con la familia catalana a última hora de la tarde, según ha confirmado hoy la inmobiliaria a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV)

    Con este pacto, la saga familiar ha cerrado uno de los frentes que tiene abierto derivados de su incapacidad de hacer frente a una deuda de 5.200 millones de euros. En este primer acuerdo, los seis bancos se han quedado con las garantías del préstamos que dieron los Sanahuja. El aval que presentó eran 38,1 millones de acciones, lo que supone el 54,7 por ciento del capital. Este porcentaje era insuficiente para saldar las deudas con este grupo de entidades financieras, de manera que la familia tuvo que darles más títulos de la inmobiliaria española para satisfacer a la banca.

    Si sumamos la primera entrega de 38,1 millones de acciones, más la segunda de 7,5 millones, las seis entidades financieras han pasado a controlar el 65,5 por ciento de la inmobiliaria, lo que supone tener el control y la mayoría de Metrovacesa. Con estas cifras, la participación de los promotores catalanes menguará hasta el 15 por ciento, frente al 80 por ciento que ostentaba hasta ahora.

    Los siguientes pasos

    Pero esta no será la radiografía accionarial de la primera inmobiliaria española. Este es el escenario después de que la familia haya apagado uno de sus frentes. Y es que ahora tiene que enfrentarse a otras negociaciones.

    Por un lado, tiene que cerrar las negociaciones que mantiene con grupo de bancos liderado por Barclays para saldar sus deudas con estas entidades financieras. Estas entidades tienen como aval de los préstamos, títulos de Metrovacesa, que representan un 14 por ciento del capital, aproximadamente. Por otro lado, la familia también mantiene conversaciones con la entidad británica HSBC para alcanzar un pacto con el préstamo, cuyas garantías son el 11 por ciento del capital de la inmobiliaria.

    Si finalmente estas dos negociaciones se sellan con la ejecución de los avales, los bancos pasarían a tomar más del 80 por ciento de la compañía y los Sanahuja se quedarían con las manos vacías.

    Este escenario no se prevé que se desarrolle literalmente, ya que una parte de las deudas se saldarán con activos que tiene la familia, a través de su promotora Sacresa. De hecho, existe una división entre las entidades financieras acreedores sobre el reparto del pastel. Y es que unos prefieren saldar la deuda con acciones de la inmobiliaria española, mientras que otros apuestan por quedarse con propiedades.