Henri Poupart-Lafarge y Joe Kaeser: "El trabajo para conseguir la integración comienza ahora"
Les Échos
La creación del gigante ferroviario europeo fruto de la fusión Alstom y Siemens lleva gestándose desde hace meses. Sin embargo, los máximos responsables de las compañías son conscientes de que la verdadera integración y sus retos empiezan ahora.
¿Quién ha dado el primer paso hacia el otro?
J. Kaeser: Sinceramente, no me acuerdo. La idea de unir nuestras actividades siempre ha estado en el aire, pero antes no era el momento oportuno. Ahora lo es.
H. Poupart-Lafarge: El movimiento ha sido progresivo. Habíamos realizado estudios estratégicos, cada uno por su parte, que demostraban que unir nuestros dos grupos era la mejor opción. Se iniciaron las conversaciones y esta vez llegaron a buen puerto.
El anterior gobierno había clasificado en un decreto el sector ferroviario como una actividad estratégica, sobre la que el Estado tenía un derecho de control. ¿Cómo se traduce esto?
H.P-L: Esta transacción se ha realizado con el completo apoyo de los dos gobiernos, hemos mantenido informado al Estado francés y hemos debatido los compromisos que podían asumirse en este contexto. Pero lo hubiéramos llevado a cabo igualmente sin este decreto.
¿Deberán hacer nuevas composiciones con el decreto en el futuro?
H.P-L: No. Como hemos dicho en varias ocasiones, nos encontramos en un mercado en crecimiento. Este acuerdo debe crear valor para todas las partes, incluidos trabajadores, y reforzar el grupo.
Deberán combinar dos culturas: Alstom tiene un funcionamiento más bien descentralizado, lo que no es el caso de Siemens...
H.P-L: Las intensas conversaciones que hemos llevado a cabo estas últimas semanas entre las dos empresas han sido extremadamente constructivas. Han demostrado que hablábamos el mismo idioma, que teníamos la misma visión de futuro del grupo y de cómo materializarla. Por supuesto, existen necesariamente obstáculos que hay que superar para la integración de un conglomerado de este tamaño. Esto se hará progresivamente, y negociando con los directores y los trabajadores de los dos grupos fusionados, que nos determinarán la mejor manera de seguir adelante.
J.K.: Hay muchas discusiones sobre quién asume el control y en particular posturas según las cuales Francia perderá uno de sus bastiones. Pero si por casualidad Siemens tuviera la mayoría absoluta del capital, esto solo tendría impacto una vez al año, durante la junta general de accionistas. Al mismo tiempo, 30.000 trabajadores alemanes no trabajarán ya cada día para Siemens, sino para una compañía francesa. ¡Piénselo! Lo verdaderamente importante no es el control sino conseguir que, tras la finalización de la operación, los trabajadores no se definan como ex-Alstom o ex-Siemens sino como trabajadores Siemens Alstom.
¿Cómo piensan conseguirlo?
H.P-L: El trabajo para lograr la integración comienza a partir de ahora, aun cuando el acuerdo no sea efectivo hasta dentro de más de un año. Será preciso integrar a todos los equipos, y esto supondrá respetar las competencias de cada uno. La equidad, será asimismo primordial: las decisiones deberán adoptarse sobre una base racional, de manera transparente. Pero será una tarea inmensa, somos conscientes. Los equipos están dispuestos a asumir el reto.
¿La gestión compartida a la alemana, que incorpora a los sindicatos en la toma de decisiones, estará vigente en el nuevo grupo?
J.K.: Los sistemas francés y alemán son diferentes. Las reglas que se aplicaban en cada uno de los dos países perdurarán. Deseamos sin duda que los representantes de los trabajadores hagan valer su punto de vista. No hay que confundir: consultar no quiere decir dirigir conjuntamente con los sindicatos.
¿Cómo piensan conciliar su compromiso de mantener los empleos durante cuatro años con los importantes problemas de baja carga de trabajo por los que atraviesan algunas empresas francesas?
H.P-L: Nos comprometemos a no cerrar ninguna planta, y a mantener el nivel global de empleos de Alstom y de Siemens, en Francia y en Alemania. Esto no excluye ajustes específicos, y no nos impedirá tratar los momentos de menor actividad de manera socialmente responsable, aun cuando una vez más este acuerdo se oriente principalmente a crear más empleo, ya que está claro que nuestro objetivo es ganar nuevas cuotas de mercado.
Dentro de cuatro años, ¿Siemens-Alstom seguirá formando parte de la actividad principal de Siemens?
J.K.: La movilidad es un sector en crecimiento, tanto de pasajeros como de mercancías, con el comercio electrónico. Siempre que sea un éxito, no hay motivo para que salga de nuestra actividad principal.