Empresas y finanzas
Carlos González Bosch, el presidente de Cofares que impulsó la concentración del sector y una gestión más eficiente
- Cederá el testigo en la presidencia de la mayor distribuidora española de fármacos el 29 de junio
Juan Marqués
Carlos González Bosch cederá el testigo de la presidencia de Cofares el 29 de junio. Será en la Asamblea General del Grupo que elegirá a su más que probable sucesor, Juan Ignacio Güenechea, su candidato y mano derecha durante los 12 años que ha dirigido la distribuidora farmacéutica líder en España y la única de alcance nacional.
En sus tres mandatos no prorrogables, esta cooperativa de más de 10.200 socios farmacéuticos no ha dejado de ganar terreno a sus competidores. Así ha sido en los años de bonanza económica y en los que ha tenido que buscar la máxima eficiencia para seguir siendo rentable, sin dejar de financiar y librar a muchas farmacias del cierre cuando se acumulaban los impagos de las recetas en algunas regiones.
Cofares ha ganado así nueve puntos de cuota de mercado desde 2005, hasta situarla en casi el 26,5 por ciento del total en 2017. Este salto ha convertido al grupo en "el mayor holding empresarial del mundo sanitario en España", con una facturación que superará los 3.000 millones de euros este ejercicio.
González Bosch ha liderado este proceso de crecimiento promoviendo cambios profundos en un sector excesivamente fragmentado que tuvo más de 70 operadores, buscando siempre solidez y solvencia financiera, pero sin perder de vista la esencia de un modelo cooperativo difícilmente comparable y reproducible en el mundo.
Al final del trayecto, los hechos y la huella que la crisis ha dejado en farmacias y distribuidoras le han dado la razón. El sector está inmerso en un proceso de concentración, quizás apresurado, donde cuatro grupos absorben ya el 60 por ciento del mercado, más en línea con Europa. Y no ha sido fácil, porque su primer intento de apadrinar una gran fusión con Hefame en 2006 fracasó por las renuencias de los socios de esta última.
Pero no solo ha abogado por el tamaño para competir. Ha buscado modernizar y profesionalizar un modelo de distribución cooperativa que mueve millones de unidades con muy poco margen y poco precio. Esto le ha llevado a diversificarse a través de más de 20 empresas y a invertir en tecnología para generar eficiencias en un sector que sigue garantizando tres entregas de media al día por farmacia, quemando demasiados kilómetros y duplicando rutas.
A la vertiente empresarial, que desde 2015 impulsa en la presidencia de la Comisión de Sanidad y Asuntos Sociales de la CEOE, hay que unir su vena social. A través de la Fundación Cofares, ha promovido acciones solidarias, como la recogida y donación de alimentos infantiles o medicamentos, entre otros productos de primera necesidad, en las distintas crisis humanitarias.
Nunca se ha escondido, es uno de los empresarios más accesibles del sector. Tampoco rehúye ninguna pregunta, quizás porque desde muy joven tiene pasión política, que le llevó a fundar primero las Juventudes Liberales y más tarde las juventudes de UCD.
Al final se volcó en su profesión y en la defensa del actual modelo de farmacia, pero no desde su statu quo, sino desde la necesidad de introducir cambios que refuercen su viabilidad. Seguirá haciéndolo ahora desde la CEOE, promoviendo la colaboración privada en la sanidad y el valor que representa este sector como generador de riqueza, empleo y bienestar social.